Interceptaciones fueron ordenadas por Uribe al ex director Andrés Peñate: Marta Leal

Cinco objetivos de seguimiento habrían sido los entregados por el entonces director del Departamento Administrativo de Seguridad, DAS, Andrés Peñate, a la ex subdirectora de Inteligencia del Organismo de investigación del Estado Marta Leal: la Senadora Piedad Córdoba; el ex candidato Gustavo Petro; La Corte Suprema de Justicia, Daniel Coronell y la relación de Petro y Córdoba con agentes de los gobiernos de Venezuela y Cuba, para ayudarlos en las pasadas elecciones e iniciar una posible entrada de la Revolución Bolivariana a Colombia. La información hace parte de la más reciente declaración entregada por Leal a la Fiscalía este jueves 14 de octubre, según informó este viernes la Cadena Radial Caracol. Según el informativo, la ex funcionaria del DAS, investigada por las interceptaciones telefónicas a importantes personajes de la vida nacional, responsabilizó a Peñate de las ‘chuzadas’ y dijo que éste le informó que la orden provenía del propio Presidente (en ese momento) Álvaro Uribe Vélez "Esta información, según palabras del doctor Peñate, era requerida por el entonces Presidente Álvaro Uribe y en varias ocasiones me requirió (Peñate) por los resultados que, hasta la fecha que él se retiró del DAS, no se habían logrado conseguir", citó Caracol Radio. Leal manifestó que de los cuatro grupos de investigación que tenía a su cargo, dos fueron destinados a infiltrar la Corte Suprema de Justicia con el fin de conocer el concepto que manejaba en relación con el proyecto de reelección presidencial; de interceptar a la senadora Córdoba, al ex presidente del Polo Democrático Gustavo Petro y al periodista Daniel Coronell. "Por instrucciones dadas por el doctor Andrés Peñate, a Carlos Arzayús, en ese entonces director nacional de inteligencia, la subdirección de operaciones a mi cargo recibió 4 grupos especiales de inteligencia, dos de ellos contra el terrorismo y dos de ellos para actividades de contrainteligencia de Estado. Estos dos últimos se denominaban ‘Venus’ y ‘Bahía’ y tenían como finalidad investigar las actividades irregulares o ilegales realizadas por agentes de otros países en Colombia, específicamente de Cuba y Venezuela", citó la emisora a la ex subdirectora del DAS. "Recibí instrucciones del doctor Peñate de buscar la manera de establecer si la senadora Piedad Córdoba había viajado a la ciudad de México a una reunión organizada por el partido de los trabajadores de ese país, con recursos dados por ese mismo partido, conseguir la copia de la factura del hotel para demostrar que ella había faltado a la verdad cuando afirmó que tanto el viaje como los gastos del hotel y comida fueron pagados con recursos propios", dijo Leal a la Fiscalía. "Con base en esas investigaciones, que estos grupos adelantaban, el doctor Peñate conoció información de la senadora Piedad Córdoba y del senador Petro, como de su ex esposa en la cual se identificaba la relación que estas personas tenían con funcionarios del gobierno de Venezuela", afirmó. REVOLUCIÓN BOLIVARIANA El objetivo era conocer quiénes "estaban interesados en implantar, en el territorio nacional, la Revolución Bolivariana, bandera del Presidente de Venezuela Hugo Chávez y quién estaría interesado por parte del gobierno de Venezuela para ayudar las candidaturas de ellos". Agregó: "El doctor Peñate ordenó hacer todas las labores de búsqueda de información, labores de campo del periodista Daniel Coronell, para determinar si estaba en el país y quiénes eran sus fuentes de información, pues según lo indicado por el Presidente Uribe, estaba muy molesto por los artículos que éste venía publicando en la revista Semana". Sobre la infiltración a la Corte, Leal dijo: "Siendo subdirectora de operaciones, el doctor Andrés Peñate me dio instrucciones de buscar fuentes humanas que le dieran al DAS información sobre qué posiciones habían al interior de la Corte sobre el tema del referendo, e iguales instrucciones me dio para coordinar este trabajo con Willian Romero, subdirector de fuentes humanas". Romero fue el encargado de contratar a la ex detective del DAS Alba Luz Flórez Gélvez, conocida como la Mata Hari, quien a su vez convenció al personal de servicio del Tribunal para instalar grabadoras en las salas privadas de debate de los magistrados.