EPA denuncia derrame de hidrocarburo en la Bahia de Cartagena

El derramamiento de cierta cantidad de hidrocarburo en la Bahía hizo que el Establecimiento Público Ambiental, EPA abriera una investigación de los hechos con el acompañamiento de la Capitanía de Puerto, con el fin de determinar las responsabilidades en los hechos.
Después de recibir información en horas de la tarde de ayer sobre la emergencia ambiental, la directora del EPA, María Angélica García Turbay, realizó una inspección en la Bahía, en la zona de Albornoz, con el acompañamiento del Cuerpo de Guardacostas de la Armada Nacional.
“En el recorrido se evidenció la presencia de hidrocarburos en al agua en la zona marina aledaña al área de operaciones de las empresas Petrocosta, Areda Marine Fuel y Marina Todomar, sin poder determinar la fuente debido a la oscuridad”, explica la directora del EPA.
Según la normatividad colombiana, existe una corresponsabilidad en la atención a derrames de hidrocarburos, y toda persona que conozca un incidente de esta índole debe informarlo de inmediato a las autoridades ambientales y marítimas.
“Quien detecte un derrame, aún sin ser responsable, si tiene los medios, el entrenamiento y el equipo necesario debe iniciar el control. Toda empresa que en su actividad comercial maneje hidrocarburos, está obligada a poseer un plan de contingencias de acuerdo con el modelo establecido por el decreto 321 de 1999- Plan Nacional de Contingencias contra Derrames de Hidrocarburos, Derivados y Sustancias Nocivas en Aguas Marinas, Fluviales y Lacustres”, comenta García Turbay.
Este Plan establece un orden de prioridades  para la respuesta, dentro de los cuales la protección a la vida humana se encuentra en primer lugar, seguido por la protección al medio ambiente, por encima de otras consideraciones de la empresa afectada. De igual manera, la respuesta tiene unos pasos estandarizados a nivel internacional que obligan al control de la fuente del derrame, como primera medida, siguiendo labores de contención, dispersión y limpieza.
Un derrame de combustible puede afectar el medio marino y la calidad del agua de varias maneras dependiendo de las propiedades físicas y químicas del producto y sus efectos pueden permanecer entre unas horas hasta varios años. De igual manera, al evaporarse las fracciones livianas, los elementos tóxicos son peligrosos tanto para los que realizan la repuesta a la emergencia si no están debidamente equipados y entrenados, como para las comunidades aledañas.
El Establecimiento Público Ambiental EPA-Cartagena está atento a toda inquietud de la  comunidad y de los sectores productivos para asesorarlos en la formulación de planes de contingencia.