Este jueves 28 de marzo la Sociedad Aeroportuaria de la Costa, SACSA, operadora del Aeropuerto Internacional Rafael Núñez de Cartagena, acompañará el sexto vuelo humanitario operado por la aerolínea Spirit Airlines para trasladar a su país de origen a 95 norteamericanos varados en Cartagena por cuenta del cierre de los espacios aéreos por la pandemia del COVID-19.
La operación comenzará hacia las 11:28 con la apertura de cuatro counters de la aerolínea para el registro de los pasajeros y el itinerario del vuelo será el siguiente: El vuelo saldrá de Fort Lauderdale (Florida, EE. UU.) hacia Cali donde será lleno con parte de su capacidad y a las 13:28 (hora estimada) el vuelo NK6322 llegará a Cartagena para recoger los norteamericanos.
“El protocolo seguirá siendo estricto con las medidas de prevención, ninguna persona podrá bajar del avión, solo se recogerá a quienes están en Cartagena. Cada operación que tenemos es una enseñanza para estar mejor preparados y continuar con estas misiones humanitarias, además cada aprendizaje nos enriquece para el día que nos den luz verde para la reapertura del aeropuerto y los vuelos comerciales”, explica María Claudia Gedeón, gerente de asuntos corporativos de SACSA, operadora del Aeropuerto Internacional Rafael Núñez de Cartagena.
La Aeronave A321 partirá finalmente a Fort Lauderdale (Florida, EE. UU.) a las 14:28 (hora aproximada).
Todo el personal que estará colaborando con la ejecución de la misión humanitaria tendrá todas las medidas de bioseguridad para protección de ellos y de los pasajeros. Este vuelo se acoge al Decreto presidencial 439 del 20 de marzo de 2020, según el cual está permitido el transporte de pasajeros y carga con fines humanitarios o aquellos solicitados por las autoridades nacionales, departamentales o municipales.
El Aeropuerto Internacional Rafael Núñez de Cartagena de acuerdo con el Decreto de emergencia sanitaria y aislamiento preventivo obligatorio sigue manteniendo su operación restringida, pero realiza permanentes labores de desinfección de zonas públicas y privadas por medio de una máquina nebulizadora Fogger importada y mantiene vigiladas y en optimas condiciones sus instalaciones para atender las necesidades sanitarias y de suministro de la ciudad.
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