Han pasado 14 días desde que el Distrito declaró el estado de calamidad pública por la preocupante sedimentación del canal del Dique, lo que le permitirá a Cormagdalena dragar este cuerpo de agua, tratar de evitar un desabastecimiento de agua en Cartagena, recuperar su navegabilidad, y frenar un daño ambiental en los parques naturales.
Este ente estableció un cronograma de actividades en el Dique y el presupuesto que destinará para estos trabajos, que empezarán por la declaratoria de la urgencia manifiesta para contratar en un menor tiempo.
Según lo establecido por Cormagdalena, se dragará entre la bifurcación del río Magdalena, en Calamar (K0), y la desembocadura en la bahía de Cartagena, (K117+200). Esta es la parte que necesita mayor atención, según la calibración hidrosedimentológica que se hizo entre los años 1981 y 1984; es un vector muy importante de sedimentos.
El estudio deja ver que las arenas más gruesas se depositarán en los primeros kilómetros del canal y deben ser retiradas mediante dragado; una parte de los sedimentos de talla media se depositarán a lo largo del canal y en el sistema cenagoso con el cual está conectado el canal; y los sedimentos más finos que atraviesan todo el canal serán transportados por el agua y después se sedimentan por floculación al contactar al agua salada en la bahía de Cartagena, la de Barbacoas, mediante el caño de Correa, y en el mar. Una fracción de los sedimentos medianos llegará igualmente hasta el mar.
El canal del Dique se dividió en tres sectores en los que se requiere remover la barra de sedimentos, que impiden la entrada de caudales suficientes al sistema para alimentar el acueducto de Cartagena, y que a lo largo del canal presenta obstáculos y riesgos para la navegación segura de las embarcaciones y para la conectividad de los cuerpos de agua, así:
- Alto canal del Dique: tramo entre la bifurcación del río Magdalena en la población de Calamar (K0) y la población de Soplaviento (K33). En este sector se han concentrado los dragados de mantenimiento en los últimos años, en la trampa de sedimentos de Calamar, entre el K0+150 y K0+725; y en algunas ocasiones ha sido necesario dragar barras que aparecen aguas abajo de la trampa de sedimentos hasta el kilómetro 5; y en los sectores de las poblaciones de Santa Lucía (K10), San Cristóbal (K23) y también en Soplaviento (K33).
- Medio canal del Dique: entre Soplaviento (K33) y la bifurcación del caño de Correa (K82). En este sector no se han realizado dragados de mantenimiento en los últimos años.
- Bajo canal del Dique: entre la bifurcación del caño de Correa (K82) y la desembocadura del canal en la bahía de Cartagena (K117+200). En este sector se concentran los dragados de mantenimiento, entre el K114 y K117+200.
La hoja de ruta precisa que el método de remoción de los sedimentos se realizará mediante dragas de corte y de succión en marcha, dependiendo de las características del sector y del sitio de disposición de los sedimentos. Para esto se requiere dragar para tener una sección hidráulica de ocho pies de profundidad con un ancho de solera de 60 metros y taludes variables.
Para ejecutar estas obras se deberá aplicar la Guía Ambiental de Proyectos del Subsector Marítimo y Fluvial de Invías, del 2011.
Luego que el Distrito decretara la calamidad pública, Cormagdalena debe declarar la urgencia manifiesta mediante resolución debidamente motivada, para contratar en un menor tiempo las actividades que se requieren.
Una vez declarada la urgencia, se invitarán empresas privadas a ofertar el precio y la disponibilidad de equipos para realizar las actividades, a fin de que se escoja la mejor opción. Todo esto en un plazo de siete días.
Escogida la oferta, se deben suscribir y perfeccionar los contratos en tres días, y el plazo de ejecución del contrato se estima en tres meses.
Cormagdalena precisó que este cronograma es tentativo, ya que depende del concepto jurídico relacionado con la consulta previa que se realiza en Pasacaballos.
Este medio intentó contactar al director de esta corporación, Lucas Ariza, para conocer si se había declarado la urgencia manifiesta y los tiempos del proceso, pero hasta el cierre de la edición no se obtuvo respuesta.
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