Mientras algunos barrios de la ciudad lograron recibir servicios de salud en modernas instalaciones durante 2017, otros siguen aferrados a que ese milagro les ocurra este año.
Es que aunque 12 de los 25 Centros de Atención Permanente (CAP) y Unidades Primarias de Atención (UPA) priorizados en el gobierno de Dionisio Vélez, para ser construidos y remodelados, tienen los recursos asegurados, el año anterior solo alcanzaron a entregarse seis.
¿En qué estado están las obras priorizadas desde 2015?, ¿a qué se debe la demora? y ¿cuánto tiempo más se prolongará la espera?, son las inquietudes más sonadas en las comunidades que están expectantes de la entrega de las obras.
Canapote
En el Hospital Canapote la intervención se inició el 23 de febrero de 2015 y a la fecha no se ha culminado.
César Feria, presidente de la Liga de Usuarios del Hospital Canapote, afirmó que a mediados de diciembre “tuvimos una reunión en el Dadis y nos socializaron el reinicio de la obra. La empresa Coinses, a cargo de terminarla, manifestó que en siete meses podría ser entregada, es decir, por ahí en julio de 2018”.
“El día de la reunión -anotó el líder- preguntamos en qué estado de avance está la obra y nos dijeron que en un 40%. Es decir, ha sufrido un atraso grande, porque venía de la administración de Manolo Duque, que decía que para continuarla tenía que averiguar lo que había pasado en la administración de Vélez, en la cual se acabaron los recursos para terminar la obra. Estar a puertas de la elección de un nuevo alcalde nos preocupa, podría representar otra parálisis”, indica Feria.
Pero esa no es la única preocupación que tienen los residentes del mencionado barrio. Hay otra más inmediata. “Coinses manifiesta que para adelantar los trabajos en el primer piso del hospital, donde está funcionando Urgencias, esta debe ser trasladada. No estamos de acuerdo, nos oponemos porque nos dejarían sin ese servicio.
Las personas que lo requieran pueden perder la vida mientras llegan al barrio La Esperanza, que es donde sería la Urgencias más cercana”, advirtió Feria.
Añadió que “la firma contratista se comprometió a averiguar una casa en Canapote donde pudiera ser trasladada la Urgencias”. El avance de la obra depende de este traslado.
El Pozón
El 23 de abril de 2015 se inició la construcción de otro hospital que no ha sido entregado: El Pozón.
“Ahí ha habido el inconveniente del pago a los obreros. Ellos comenzaron a trabajar en septiembre y cuando se venció el mes no les pagaron. Ese personal se mareó y se fue. Trajeron a un segundo personal que incluso iba a hacer huelga porque no le pagaban. Ahora está trabajando gente nueva”, aseguró Filadelfo Montero, vicepresidente de la Asociación de Usuarios del Hospital El Pozón.
Indicó que “los contratistas (Coinses) dicen que la obra tiene un 60% de avance, pero ahí no hay eso. Todos los líderes conocemos el hospital y sabemos que no tiene eso, puede tener un 50% de avance. A finales de octubre, en la ultima reunión que tuvimos con ellos y el Dadis, nos dijeron que en noviembre entregaban la Urgencias.
Les extendimos el plazo hasta el 30 de diciembre porque sabíamos que no iban a terminarla en noviembre y a la fecha continúa atrasada”.
Montero resaltó que “le pedimos al Distrito que aligeren la obra para tenerla a disposición de la comunidad en tres o cuatro meses como tarde porque ya hemos esperado demasiado. A este ritmo ese hospital lo terminarán a finales de 2018”.
¿Qué pasa con los “no entregados”?
Consultada por El Universal, la directora del Departamento Administrativo Distrital de Salud (Dadis), Adriana Meza, recordó que “los recursos del crédito a la banca privada ($100 mil millones) alcanzan para terminar 12 centros de salud, de los cuales a la fecha se han entregado seis: Pontezuela, Arroyo de Piedra, Líbano, Fátima, Caño de Loro y El Socorro. El Distrito los entregó a la ESE Cartagena y a partir de esa entrega, la ESE como Empresa Social del Estado es autónoma y responsable de su mantenimiento, reparación y cuidado. Se entregaron dotados con aires acondicionados, equipos médicos y de cómputo, silletería, en fin, completos”.
Señaló que “están pendientes los puestos de salud donde ya se habían iniciado las obras, los que tenían más del 60 o 70% de avance de obras y los que por las condiciones de la población se requieren con urgencia”. Entre estos está el CAP Bayunca, cuya construcción se inició el 18 de mayo de 2015.
“Bayunca está listo -resaltó Meza Yepes-. Para poder electrificar ese centro de salud se requiere certificado Retie (Reglamento Técnico de Instalaciones Eléctricas) y Retilap (Reglamento Técnico de Iluminación y Alumbrado Público). Ya la firma certificadora realizó la visita, hizo unas observaciones y regresa el 15 de enero. Si encuentra todo conforme nos certifica y Electricaribe nos daría permiso para electrificar”.
Anotó que “la UPA Pozón, que es el antiguo centro de salud de El Pozón, también está prácticamente para entregar. Al parecer hay un englobe en el servicio de energía eléctrica y por eso el contratista no nos lo ha podido entregar. Aclarado estos temas de servicios públicos entregaríamos Bayunca y Pozón y serían ocho los centros de salud entregados”.
Los demás
La directora del Dadis dijo que “han avanzado y están en proceso los hospitales en Barú, Canapote y El Pozón. Reiniciados los contratos en 2018, aproximadamente en los seis meses siguientes se estarían terminando”.
De los dos últimos, por los cuales líderes comunitarios abogaron en este medio, la funcionaria sostuvo que “le hemos pedido al contratista que nos vaya entregando así sea parcial. Urgencias primero, luego otro servicio y así”.
Para completar los 12 centros de salud priorizados faltaría el CAP Nelson Mandela, cuya construcción se inició el 21 de octubre de 2015, sin embargo, allí “hubo que hacer una adecuación al diseño inicial. Esperamos que se pueda reiniciar la obra en enero. Tiene un tiempo aproximado de obra de nueve meses”, dijo Meza Yepes.
“En cuanto a los otros puestos y centros de salud -agregó- no hay en este momento los recursos pero el alcalde encargado, Sergio Londoño, está empezando a hacer las gestiones para ver si podemos conseguir los recursos de algún otro rubro o por cooperación internacional”.
Sin recursos para ser construidos y remodelados quedaron los CAP y las UPA de Arroyo Grande, Puerto Rey, Arroyo de las Canoas, Punta Canoa, Daniel Lemaitre, Bocachica, Los Cerros, Punta Arena, Tierrabomba, La Boquilla, La Esperanza, Nuevo Bosque y La Candelaria.
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