Entregan 80 computadores a colegio de Arroz Barato

Se trata de la Institución Educativa San Francisco de Asís, sede Hijos del Agricultor, en donde también se inauguró una sala virtual con acondicionador de aire y todas las comodidades de un espacio de ese tipo. (Lea:Cartagena tendrà computadores para educar)
Ricardo Bray explicó que la entrega se dio gracias a un convenio firmado con el programa Computadores para Educar para que en los siguientes cuatro años se mejore la relación alumno-docente.
El Distrito está financiando alrededor de 8 mil computadores, mientras que Computadores para Educar hará lo propio con unos 5 mil computadores, lo que, según la funcionaria, significará una transformación en la educación de Cartagena.
Se espera que con esa tecnología niños y jóvenes se  preparen para enfrentar la vida universitaria y la laboral, razón por la cual se  necesita la participación del sector privado, para que estas dotaciones puedan llegar a todos los niños de Cartagena.
De acuerdo con Rosario Ricardo, en las TIC hay un nuevo programa que tiene que ver con las tabletas que adquirieron a través de una subasta pública, y con las cuales se dotará a más niños para que dispongan de tecnología también en sus hogares.
Por su parte, Julián Santos expresó que para su empresa está claro que la educación es fundamental para el desarrollo, sobre todo en lo concerniente a la tecnología, las matemáticas y las ciencias.
Por tal razón, la firma está comprometida en ayudar a las comunidades más vulnerables para que accedan a las nuevas tecnologías, se eduquen y puedan competir con eficiencia en el ámbito laboral.
Asimismo, relató que la Exxon también trabaja con la Fundación Juan Felipe Gómez Escobar, en donde encabeza un programa para madres adolescentes, con el fin de que se capaciten y se reintegren a la sociedad como seres productivos.
Igualmente, con la Fundación Mamonal hay programas educativos y de capacidades productivas para mujeres de las zonas más desfavorecidas de la ciudad.
Sin embargo, advirtió que estas iniciativas son de largo plazo, pues se trata de superar las condiciones de extrema pobreza, las secuelas de los embarazos en la adolescencia y la juventud sin capacitación.
“Por eso es necesario que las empresas que se comprometan en estos programas comprendan que los resultados no se verán de un día para otro, pero serán placenteros si se realizan con constancia y seguimiento”, puntualizó.