El asesinato de Robinson Romaña y León Jairo Rendón (dos guardaespaldas de la Unidad Nacional de Protección) en el Chocó, ha causado rechazo en la entidad y en el país.
El hecho dio paso a que los escoltas de la UNP denunciaran públicamente un abandono estatal y la falta de garantías para cumplir con su trabajo.
Con el fin de enviar un mensaje al Gobierno Nacional, desde diferentes puntos del país los escoltas hicieron una velatón en memoria de sus compañeros, a quienes los grupos armados ilegales les han arrebatado la vida, pues cabe recordar que el pasado 2 de noviembre las autoridades hallaron el cuerpo del escolta Fabián Eduardo Rivera Penagos, quien había desaparecido en el Cauca.
En Cartagena, un pequeño grupo de trabajadores se reunió a las 7 de la noche al lado de la iglesia La Ermita.
“Estamos en protesta a los asesinatos de los compañeros en el Chocó. Rechazamos todo acto violento que afecte a nuestros compañeros”, dijo Jorge Gamarra, escolta tercerizado de la UNP.
Los escoltas expresaron sus quejas de una manera pacífica, mientras sostenían pancartas con mensajes de condolencia a los familiares de los asesinados.
“En representación de los escoltas le exigimos al Gobierno Nacional que ya cesen las muertes y que se les brinden garantías a los trabajadores del programa de protección. Nosotros no hacemos parte del conflicto, nosotros cuidamos personas que hacen parte del conflicto, y por lo tanto lo que hacemos es preventivo, no buscamos chocar con nadie”, sostuvo Miguel Iguarán, presidente de la subdirectiva Unsitraseg.
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