El 26 de julio de 1987 Cartagena hizo historia en el país al convertirse en la primera ciudad que se dividió en comunas y corregimientos. Hoy, 31 años después esta demostración de democracia y participación ciudadana ha quedado relegada al olvido.
Cuando se realizó la división en Cartagena existían 33 comunas y 15 corregimientos, luego se redujeron a 23 comunas y posteriormente a 15, se instauraron las Juntas de Administradores Locales (JAL) y se comenzó a velar por las necesidades de cada comuna.
“Con la aprobación de la Ley 768 de 2002 que ordenó la reglamentación de los distritos de Cartagena, Santa Marta y Barranquilla, se dividió la ciudad en tres localidades y en cada una de ellas se instauró que debían tener una Junta Administradora Local que estaría compuesta de 9 ediles”, manifestó Bernardo Romero Parra, quien fue uno de los impulsores de las JAL.
¿En qué se ha avanzado?
Desde que Cartagena se dividió empezó todo un proceso de cambios en la estructura política, delegación de funciones y presupuesto.
“El proceso más importante fue la división de la ciudad en comunas, hacer una división que agrupara de una manera homogénea (pese a las diferencias sociales que hay) a las comunidades. Se intentó pero no se logró hacer completamente por la composición geográfica de la ciudad”, dijo Romero Parra.
Los Fondos de Desarrollo Local, constituyen uno de los grandes aportes de las JAL, ya que a través de estos los alcaldes locales tienen potestad para realizar obras dentro de sus localidades y tener autonomía en esa jurisdicción.
Sin embargo, el alcalde de la Localidad Virgen y Turística, Gregorio Rico manifestó que el presupuesto de la Localidad 2 ha disminuido, ya que este año les asignaron solo $7 mil millones representando una baja del 50% mientras que las necesidades están por encima del 300% por lo que será difícil cumplir con todo lo que está en el Plan de Desarrollo Local.
Pese al gran logro de democracia, los ciudadanos han perdido interes y confiabilidad en las JAC debido a que hay partidos políticos detrás de los ediles. “Esto ocasionó que hubiera un distanciamiento entre los elegidos y las organizaciones comunitarias porque ya ellos no representan directamente a la comunidad sino a los partidos políticos que tienen otra clase de intereses”, dijo Romero, quien además afirmó que hay ediles que han gastado hasta más de $100 millones en sus campañas.
Sin conmemoración
Para los ediles y comuneros de la ciudad, fue una tristeza ver como en la ciudad este hito histórico pasó por desapercibido ante las autoridades, las cuales en los últimos años han aminorado el acompañamiento a las JAL.
“Hoy pensé que el Distrito a través de la Secretaría de Participación Ciudadana o de su alcaldesa les harían alguna mención, porque son los comuneros quienes trabajan por temas sociales”, dijo Rafael Meza, concejal, y quien fue de los primeros comuneros elegidos.
Por su parte, el concejal Javier Curi, dijo que “más allá de hacer un reconocimiento, toca hacer un debate, porque después de 30 años sería importante conocer cuáles han sido los avances en materia de participación política y descentralización política, hay debates que se han dado en cuanto a la necesidad de reestructurar las alcaldías locales en la ciudad”.
La actividad de los comuneros fue en su momento una participación política que se realizaba por gusto a la labor, ni siquiera tenían honorarios y no requerían respaldo de ningún movimiento político, fue luego de que la ciudad se reglamentara como distrito que se hizo la solicitud para otorgarles un sueldo.
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