Lo que para Camilo Galeano empezó siendo una diversión de niños, hoy se ha convertido en su estilo de vida.
Este joven cartagenero ha dedicado gran parte de su vida a los deportes y ha conquistado triunfos importantes que lo acreditan como uno de los mejores deportistas que representa a los cartageneros.
Camilo habló con nuestro semanario y narró cómo empezó esta trayectoria deportiva:
“Desde niño, a pesar de que no era el más deportista de mi colegio, quise practicar uno, mi sueño era montar motocross, pero mis padres no me dejaban, me prometían siempre una moto para Navidad, pero nunca me la daban”, cuenta entre risas Camilo, aclarando que en esos momentos apenas tenía 12 años.
“Al darme cuenta que no me regalarían la moto, pensé en un deporte que se pareciera y empece a practicar motocross. En principio era una diversión para mí, practicaba en una pista abandonada en la Avenida del Lago, donde se reunían varias personas”.
Comenta que uno de sus próximos proyectos es donar una pista de bicicross a Cartagena. Aclara que lo hace porque este deporte es uno de los tantos donde los colombianos nos destacamos a nivel mundial, y retoma el relato sobre su vida: “Creo que lo mío no es tanto el talento, sino mi disciplina y ser constante en lo que hago, tal vez eso es lo que me ha llevado lejos”.
Galeano consiguió varios trofeos y medallas en bicicross, compitiendo por toda Colombia para demostrar sus habilidades. “Mis papás no entendían mi obsesión, pero al ver cómo me destacaba en bicicross, me apoyaron totalmente, me regalaban siempre la bicicleta más bacana”
Durante varios años Camilo acumuló éxitos en bicicross, hasta que le regalaron su primera moto y es cuando cuando decide cambiar de deporte y empezar motocross. “Hoy me arrepiento de haberlo hecho, era muy bueno y creo que el problema fue que en ese momento yo no me lo creía”, dice con nostalgia.
“Empece con motocross y era mas fácil para mí que para cualquier otro principiante, ya que el bicicross es una base del motocross”.
Destacando la adrenalina que produce manejar una moto, Camilo anota: “También llegue muy lejos, mi fuerte eran los saltos y logré ser uno de los mejores de Colombia, llegue a hacer todas las figuras que se realizaban en esa época”.
Con orgullo cuenta una de sus tantas anécdotas deportivas: “Hey tu sabes, me encanta probar cosas y en esa época no le tenía miedo a los saltos, entonces con mi entrenador hicimos una pista de dobles y triples, convocamos gente para una competencia, la gente estaba asustada por la pista tan peligrosa que habíamos hecho, pero yo me gané esa vaina relajado, era muy bueno en los saltos”.
COMPETIR ES PARTE DE MI DÍA A DÍA
“En algún momento empecé a practicar karts, lo hacía en Barranquilla, ese era otro de mis anhelos y fue éste el deporte en el que conseguí logros más rápido.
Otra de anécdota contada por Camilo: “En la primera carrera que competí me fue muy mal, estaba seguro que era por culpa de las llantas, compré unas para la segunda carrera y me la gané, desde ahí no paré de ganarme todas las válidas. Ganaba siempre, obtuve el primer puesto en el campeonato del año; dure como cinco años y llené mi casa de trofeos de karts”.
FIEBRE NÁUTICA
“Desde los 20 años comencé a hacer windsurf, fue en unas vacaciones de diciembre que me empezó la birria e iba todos los días a montar”.
“En windsurf me concentré en estilo libre y en olas, de las cinco clases que hay”. Camilo empezó a hacer cursos y a participar en competencias por el mundo, a viajar para practicar con sus velas que ahora se volvían su pasión. Viajó a Venezuela, Estados Unidos, Italia, Francia, Islas Canarias, Chile, Perú, entre otros.
“En estilo libre fui el primer colombiano que fue a las Islas Canarias a una competencia mundial, también fui el primero en hacer el tour de olas y esa vez quedé en los top 10, entre otras competencias que he ganado con el windsurf”.
Animado, prosigue sus experiencias: “En los Juegos de Mar y Playa fui a competir en la modalidad de windsurf slalom, en realidad a mí no me gusta esa modalidad, pero lo hice por que la Liga me lo pidió. El logro que conseguí en estas competencias es de los mejores de mi vida. Uno de mis sueños era ser el mejor de Colombia en algo, lo había hecho antes, pero en esta ocasión era diferente, estábamos en el marco de unas competencias nacionales donde toda la ciudad estaba enfocada en eso”.
“Este es el regalo que Dios me ha dado por todos mis esfuerzos y con esto puedo morir feliz”, dice emocionado. “Fue la primera vez que lloré a cántaros por haber ganado una competencia”, agrega.
Los nuevos proyectos deportivos de Camilo este año son las competencias nacionales de windsurf, las de mar y playa, y romper un récord guinness. “Ya una vez lo intenté y por poco lo logro, igual voy hacerlo de nuevo, pero esta vez va a ser en Cartagena, voy a superar a la persona que más ha durado navegando”.
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