El mal estado de la planta física de la Institución Educativa Omaira Sánchez, en La Candelaria, motivó a estudiantes, padres de familia y profesores a realizar un plantón en la mañana del viernes pasado en las afueras del plantel educativo.
Desde las 6 de la mañana, un candado que fue colocado en la puerta principal impedía la entrada de todo el personal, esto para dar inicio al paro indefinido con el cual esperan que se le den solución a la situación por la que atraviesa la institución.
El deterioro de las paredes, el mal estado del piso del patio, el daño en aires acondicionados y ventiladores en salones y oficinas; el mal estado del cielo raso, además del no uso del escenario deportivo con el que cuenta la institución, son algunos de las falencias más notorias que hay en la institución.
La supuesta falta de gestión del rector que estaba anteriormente en la institución generó inconformidades en la comunidad, debido a que, según los manifestantes, “nunca hizo algo por mejorar el colegio”.
La petición que los residentes, estudiantes y líderes realizan a la Secretaría de Educación es que la persona que se vaya a hacer cargo del manejo del colegio sea preferiblemente proveniente del sector.
“El rector que había realmente no hizo nada, por eso ahora que pidió traslado le exigimos a la Secretaría de Educación que sea de las entrañas de la comunidad, que conozca las necesidades y que gestione por sacar adelante esta institución”, aseguró Giovani Zúñiga, líder comunal de la zona.
Las clases en la institución siguen suspendidas y la comunidad espera recibir respuesta de parte de la Alcaldía lo más pronto, debido a que consideran que la vida de docentes y estudiantes corre riesgo.
Este medio intentó comunicarse con la Secretaría de Educación, pero hasta el cierre de esta edición no fue posible obtener respuesta.
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