Habitantes del barrio se tomaron la vía y exigieron la presencia de Electricaribe.
Debido a los constantes cortes de luz que se presentan en el barrio Nuevo Bosque, algunos vecinos decidieron tomarse una de las vías cercanas a la Iglesia y el nuevo centro comercial Outlet del barrio.
Con bultos y palos tendidos sobre la vía, los afectados hicieron sentir su voz de protesta contra la empresa Electricaribe, exigiendo el restablecimiento inmediato del servicio y la presencia de funcionarios de la empresa energética en el lugar.
Los manifestantes atribuyeron los hechos a que existen algunos transformadores viejos con refrigeramiento a base de aceite. Estos transformadores al exceder su límite de voltaje empiezan a destilar el líquido residual que además es incandescente y se convierte en un peligro para la comunidad.
Por otro lado, los protestantes afirmaron que Electricaribe se excusa argumentando que no han permitido la implementación de nuevos contadores que funcionan de forma eléctrica. Según sus declaraciones ellos no han permitido este nuevo sistema porque no les permite controlar su consumo y las mediciones solo llegan a Electricaribe, hecho que genera desconfianza pues para los habitantes Electricaribe podría manipular la cifra a voluntad.
La noche anterior, los habitantes reportaron un corte de luz que fue arreglado alrededor de las 3 de la mañana. El arreglo solo duró dos horas porque desde las 5 a.m. de este sábado uno de los transformadores estalló dejando al sector sin luz.
Hacía las 4 de la tarde de este sábado se generó la protesta ya que los habitantes ya completaban 11 horas sin el servicio.
CASO DE AFECTADO POR LA PROBLEMÁTICA
Ángel Custodio Carriazo, habitante del sector afectado, es un hombre de avanzada edad que sufre una Bronquiectasia la cual consiste en una dilatación anormal e irreversible del árbol bronquial que conduce el aire desde la tráquea hasta las unidades funcionales respiratorias. Sus pulmones se encuentran colapsados y por ello es considerado un paciente oxigeno-dependiente.
La respiración asistida la recibe a través de un condensador eléctrico que le permite tener un flujo constante de aire hacía sus pulmones. Segundos después de cortar el oxigeno, Custodio empieza a sentir sensación de ahogamiento y empieza a desesperar.
Sus familiares han compensado el problema de los cortes de luz con una bala de oxigeno manual que solo dura 24 horas y cada bala cuesta 80.000 pesos generando un gasto considerable para la familia del señor Ángel.
“Un día como hoy se me llega a acabar el oxigeno de la bala y debo correr con él al hospital porque los fines de semana no venden estas balas. Cualquier cosa que le pase a mi papá es culpa de Electricaribe ” manifiesta Petrona Carriazo, hija del afectado.
ELECTRICARIBE RESPONDE
Electricaribe justifica que los cortes intermitentes en el servicio se deben a que la comunidad ha rechazado la implementación de un nuevo sistema eléctrico. Efectivamente este nuevo sistema trae nuevos contadores que ya no son mecánicos sino electrónicos.
Sin embargo, la empresa manifestó que es falso que estos nuevos contadores digitales no permitan al usuario monitorear su consumo. Los contadores cuentan con una pantalla pequeña que reemplaza la aguja por números digitales que permiten una medición más exacta del consumo.
Por otro lado, la empresa energética explica que la demanda energética se ha aumentado considerablemente saturando los sistemas e infraestructuras en el sector generando daños ya que las habitantes empiezan a construir segundos y terceros pisos con conexiones eléctricas sin notificar a la compañía.
Electricaribe manifestó su voluntad de trabajar en el caso y durante la noche de este sábado enviaron una cuadrilla para arreglar inmediatamente el problema que presenta el barrio.
Adicionalmente también mostraron su intención de volver a trabajar con la comunidad para crear una consciencia sobre los beneficios del nuevo sistema eléctrico y advirtió que todos aquellos que sean sorprendidos con el contador mecánico adulterado o conexiones fraudulentas tendrán en sus facturas un cobro adicional como penalidad.
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