Hasta el plano nacional se propagó lo sucedido hace cuatro meses en un restaurante del corregimiento de La Boquilla, cuando un grupo de turistas denunció el cobro exagerado por consumir tres platos de sopa, dos cervezas y una gaseosa. La cuenta superaba los 200 mil pesos.
A raíz de esta situación, autoridades locales exigieron a los propietarios de establecimientos comerciales de La Boquilla controlar los precios de los productos que ofrecen, además de ubicar en lugares visibles un listado con estos valores. (Lea aquí: Controlan precios en restaurantes de La Boquilla)
Desde entonces, la Asociación de Restauranteros de La Boquilla, que agrupa a 135 propietarios de establecimientos que ofrecen servicios en la playa del corregimiento, inició un proceso junto a la Alcaldía de la Localidad 2: De la Virgen y Turística, para frenar la especulación y los supuestos abusos denunciados. Uno de los primeros resultados del proceso es el acuerdo de precios fijos que ahora manejarán todos los restaurantes hacia los clientes.
“Se desarrollaron unas mesas de trabajo con los propietarios desde la Alcaldía Local para concertar y fijar precios definitivos que sean de manejo general de todos los restaurantes. Son 135 restaurantes que hay en el sector que establecerán estos precios fijos, para que incidentes como los pasados no ocurran más, porque eso es lo que está mostrando una cara negativa de Cartagena”, señaló Heidy Villareal, alcaldesa de la Localidad 2.
La alcaldesa menor explicó que aunque ya se fijó el listado de precios que manejarán los restaurantes de la zona, en un mes comenzaría a funcionar este sistema.
“Los precios los establecieron los mismos propietarios en concertación entre todos ellos y bajo un acompañamiento de la alcaldía menor. Ahora se debe realizar un diseño para presentar este listado, que en cada restaurante se deberá exhibir en un sitio visible a todos los clientes, ya que el consumidor tiene todo el derecho de escoger en dónde desea consumir”, agregó.
Además de la concertación de precios fijos a todos los restaurantes, la Alcaldía Menor espera desarrollar en La Boquilla otras actividades complementarias al proceso como campañas de concientización hacia los visitantes para que no permitan la intervención de los llamados “pide pide” (jóvenes que desde la carretera llaman a los clientes y los llevan a los restaurantes), sino que escojan de manera autónoma el establecimiento de su preferencia. Para participar de la estrategia, los propietarios solicitaron a la Alcaldía Menor el mejoramiento en la iluminación de la zona y el manejo ambiental, aspectos en los que también se proyecta intervenir.
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