Residentes y comerciantes del barrio El Rubí llamaron la atención de las autoridades distritales para que detengan el desmoronamiento del revestimiento en concreto del canal Ricaurte.
Una gran parte de El Rubí está a orillas de la transversal 54 y a orillas de un tramo del canal Ricaurte, conducto que lo divide del sector del mismo barrio donde están varias discotecas y una estación gasolinera, que hacen frente con el barrio San Pedro.
En el tramo que sube hacia la clínica Blas de Lezo hay varios establecimientos comerciales, la mayoría relacionados con el arreglo y venta de piezas para automotores.
Precisamente, fueron estos comerciantes quienes alertaron sobre la destrucción del concreto y el desgaste del terraplén que lo sostiene.
“Tanto la tierra como la placa de concreto --explicaron-- se han ido cayendo por acción de los aguaceros de los últimos días”.
Del lado del canal donde está el daño, hay una vía que comunica la transversal 54 con la avenida Pedro de Heredia, razón por la cual es muy traficada por automóviles y motos y uno que otro camión proveedor de tiendas, “pero nosotros creemos que si no se hace algo pronto, el mismo peso de los carros podría ayudar a que todo el plafón se vaya al fondo del canal”.
La especulaciones de algunos de los alarmados fueron más allá, dado que consideraron que, incluso, el mismo puente que divide a San Pedro de El Rubí podría desplomarse y dejar a ambos barrios incomunicados, lo mismo que la Bomba El Amparo y la carretera Troncal de Occidente.
Cabe recordar que el canal Ricaurte está trazado desde el barrio El Socorro, pasando por las urbanizaciones Santa Mónica, La Plazuela, Torres de la Plazuela, San Pedro y El Rubí, hasta llegar a Los Alpes, Las Gaviotas, San Antonio, Olaya Herrera y desembocar en la Ciénaga de la Virgen.
Esa arteria pluvial está contemplada como parte importante en el Plan Maestro de Drenajes Pluviales del Distrito.
Respecto a las preocupaciones de los habitantes de El Rubí, el secretario de Infraestructura del Distrito, Édgar Marín, anunció que enviará una comisión de su despacho a inspeccionar, pero haciendo la salvedad de que la Alcaldía, en estos momentos, no tiene disponibilidad de obras, puesto que no hay recursos monetarios.
“No obstante --anotó--, miraremos qué tan grave es la situación, para ver si se puede mitigar de alguna forma”.
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