El sábado 24 de abril se desplomó una placa en un centro comercial en construcción en el barrio La Carolina, dejando a dos personas heridas. De acuerdo a los técnicos que visitaron la estructura, el incidente pudo haberse ocasionado por una falla en los gatos al momento de verter el concreto para formar la losa.
Por otra parte, la Oficina de Control Urbano indicó que la obra cuenta con licencia de construcción, pero el hecho está en investigación y esta semana se revisará a detalle. (Lea aquí: Se desploma parte de un plafón de centro comercial en construcción)
La situación recordó el desplome de Portales de Blas de Lezo, que ayer casualmente cumplió cuatro años; así como volvió a poner sobre la mesa la necesidad de mayores controles a las construcciones.
Según contó Andrés Porto, director de Control Urbano, la pandemia impuso límites para la realización de operativos y en 2020, a partir de septiembre, se lograron hacer cuatro recorridos.
“No sabíamos cómo afrontar un territorio con la pandemia. Hicimos varios tipos de análisis e intentamos con drones y otras cosas complementarias, pero se notó que no se llenaba el rigor porque son diferentes entidades las que deben participar y había que coger en flagrancia a la gente”.
Teniendo en cuenta la necesidad de ejercer control en las obras, el funcionario contó que están preparando un recorrido que harán en los próximos días, “en un lugar que no podemos decir porque el objetivo es llegar de forma imprevista”.
El último recorrido se hizo el 26 de febrero de este año, junto con Gestión del Riesgo, en los barrios Chipre y La Castellana, y se paralizaron cuatro obras.
“Oficializamos a la Secretaría del Interior, que es la que tiene el manejo de los inspectores de Policía, para que se reúna con todos y establezca unas necesidades de recorridos en la ciudad, con días determinados y rutas definidas”, indicó Porto.
Agregó que este año la meta establecida en el plan de acción es hacer 13 recorridos e incluso llegar a los 16.
Además de los recorridos hechos en el marco del Plan de Normalización Urbanística, la Oficina de Control Urbano lidera el Programa de Defensores Urbanos Barriales con el cual se busca capacitar a líderes y ciudadanía en general sobre vigilancia y control de las construcciones.
“Este mes arrancamos con las capacitaciones y ya llevamos tres, hicimos una con la Universidad San Buenaventura, otra con el Colombo y en días pasados una con los inspectores de Policía nuevos, que fue la primera que se hizo presencial”.
De acuerdo con Porto, el año pasado se cumplieron las metas de esa línea estratégica pero todas las reuniones fueron virtuales. (Lea aquí: El año para impulsar el Plan de Normalización Urbanística)
“Tenemos este año la meta de capacitar 1.300 personas, que es bastante fuerte en el tema de virtualidad. Presencial es más fácil porque se puede concentrar a la gente, así que en promedio se están capacitando entre 30 y 50 personas de manera virtual. Ya van más de 150 personas capacitadas en el 2021, en un mes”.
Siendo conscientes de que una construcción ilegal, sin permisos suficientes o adelantada sin los mínimos estándares de calidad representa un riesgo, no solo para los obreros y futuros residentes, sino para toda la comunidad, el director de la Oficina Asesora para la Gestión del Riesgo de Desastre, Fernando Abello, instó a la ciudadanía a estar atenta a las construcciones que se realizan en su sector y en caso de detectar alguna anomalía, acudan a los organismos competentes para denunciarla.
“Como ciudadanos estamos llamados a participar en la Gestión del Riesgo, denunciemos a las construcciones que no llenan los requisitos, a quienes levantan los sellos y siguen construyendo, así contribuimos a una ciudad menos vulnerable y más resiliente”, señaló Abello.
Las denuncias son recibidas a través de los diferentes canales de la Oagrd como redes sociales, correos institucionales y call center: 641 1370.
El director de Control Urbano contó que además de la investigación por el desplome en La Carolina también está en curso un proceso por una obra en la Calle Cochera, en el Centro Histórico.
“La obra se está desarrollando sin licencia. Yo observé, desde las edificaciones vecinas, que está avanzada y ya tiene valla publicitaria”, dijo Porto. Agregó que “hicimos las investigaciones en días pasados y parece que los dueños no están dejando entrar, entonces tenemos que ver cómo los inspectores de Policía pueden controlar esta situación”.
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