Los habitantes del barrio Castillogrande pidieron al Gobierno Distrital un sistema superior al de las válvulas pico de pato para reducir las inundaciones provocadas por las lluvias y por las subidas de marea.
Se refirieron, específicamente, a la calle 6, que en cada aguacero se llena de aguas pluviales y de aguas de la bahía de Cartagena, lo mismo que las carreras 14, 13, 12, 11 y 10.
Ignacio Villarreal Porras, presidente de la Asociación de Vecinos de Bocagrande, Castillogrande y El Laguito (Asobocala), contó que cuando se construyó el paseo peatonal de Bocagrande, no se pensó enseguida en una solución para las inundaciones pluviales y las subidas de marea.
Más adelante, cuando se dieron las primeras inundaciones, el Gobierno Distrital invitó a las juntas de acción comunal de la zona, pero no ventiló con Asobocala la solución que se iba a aplicar.
Sin embargo, Asobocala buscó la asesoría de la Sociedad de Ingenieros y Arquitectos de Bolívar, entidad que concluyó que el paseo peatonal tiene unos puntos críticos que no podrían solucionar las válvulas pico de pato, sino las bombas sumergibles con una capacidad de concentración de agua mucho mayor.
“Las válvulas pico de pato --explicó Villarreal Porras--, solo permiten un intercambio entre aguas pluviales y aguas marinas. Pero al momento que las dos estén en el mismo nivel, se registran inundaciones peores que las que teníamos antes de que se pusieran esas válvulas”.
En estos momentos, desde Castillogrande hasta Bocagrande, bordeando el paseo peatonal, hay cinco cajas de concreto sin válvulas pico de pato, mientras que las tapas están oxidadas, destruidas o incompletas.
En algunas cajas, las válvulas están desprendidas del tubo que permite el intercambio de corrientes de agua.
Ignacio Villarreal afirmó que no sabe si es la misma comunidad la que decide retirarlas cuando se presentan las inundaciones en los casos en que las corrientes pluviales se ponen al nivel de la bahía.
La secretaria de Infraestructura del Distrito, Clara Calderón Muñoz, aseguró que en estos momentos su despacho está evaluando la opción más idónea para reemplazar las válvulas pico de pato.
“Podría ser --anotó-- un sistema hidráulico que no permita que aguas lluvias y agua de la bahía se pongan al mismo nivel y terminen inundando las calles. Podrían ser motobombas en cada caja de concreto o cualquier otra solución que se presente fácil y barata”.
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