Debido al aumento de los contagios de coronavirus y ante la posible llegada a la ciudad de la nueva cepa del COVID-19, que se detectó en Reino Unido, el alcalde de Cartagena, William Dau Chamatt, anunció nuevas medidas para contener el virus. (Lea aquí: Cuatro nuevos muertos por COVID-19 en Cartagena, ya van 831)
A través del Decreto 0015, el alcalde estableció toque de queda a partir de este sábado 9 de enero y hasta el martes 12 de enero. La medida funcionará desde las 00:00 horas hasta la 5:00 de la mañana de cada día, es decir que la misma solo regirá en las madrugadas.
El mandatario precisó que se adoptó la medida después de reunirse con integrantes de su gabinete, en especial, la directora del DADIS, Johana Bueno, y el secretario del Interior y Convivencia Ciudadana, David Múnera, para analizar la situación desde todas sus aristas.
“Quiero decirles la información epidemiológica suministrada por el DADIS, que nos muestra que, en efecto, hay un aumento en la contagiosidad y hay una alta circulación viral; sin embargo, Cartagena no ha superado desde hace varias semanas el 65% de ocupación de camas hospitalarias UCI, lo que evidencia que no estamos al mismo nivel crítico de otras ciudades. De hecho, hoy amaneció en 58% el nivel de ocupación de camas UCI en la ciudad de Cartagena”, afirmó el alcalde.
Con relación a la posible llegada de la nueva cepa del virus al país y a la ciudad, Dau informó que, entre el Instituto Nacional de Salud y el laboratorio de la Universidad de Cartagena, en cabeza de la doctora Doris García, se realiza un estudio con muestras desde el mes de septiembre a la fecha, para identificar si se ha tenido presencia o circulación del nuevo virus en la ciudad.
“Los resultados los informaremos oportunamente, una vez se concluya la investigación. Mientras tanto, tal como lo resaltó el ministro de Salud, Fernando Ruiz, en Colombia no se ha comprobado que haya circulación de esta nueva cepa”, dijo Dau Chamatt.
Otras medidas
La administración Dau pidió a las autoridades policiales y marítimas estricto control en Playa Blanca, donde sólo está permitido la entrada de 1.000 bañistas con reserva.
Asimismo, se reforzarán los controles a la entrada de Bocagrande, para evitar el zarpe de embarcaciones no autorizadas desde la parte de atrás del hospital de Bocagrande y controlar el fondeo en Cholón, que está totalmente restringido.
Cabe recordar que entre las medidas que rigen actualmente en la ciudad está el pico y cédula para ingresar a supermercados, bancos y el Mercado de Bazurto y la prohibición de eventos públicos, fiestas privadas, utilización de picós o cualquier otra clase de artefactos de amplificación sonora que generen alteraciones a la tranquilidad y convivencia ciudadana.
El alcalde hizo un llamado a la responsabilidad, a la sensatez y a la cordura a los cartageneros y visitantes, para que se cuiden y ayuden a prevenir la expansión del virus, que ya tiene al personal médico desgastado. (Le puede interesar: Luto en la salud: fallece el médico Marco Luján Cerro por COVID-19)
“Lamentablemente muchos de ellos (los médicos) han perdido la vida en esta primera línea de batalla, y aprovecho para enviarle un abrazo fraterno y mis condolencias a sus familiares y a toda la comunidad médica y nuestros adultos mayores son en su mayoría quiénes más están perdiendo la vida a causa del COVID. Nuestro compromiso como ciudadanía es no bajar la guardia, seguir teniendo las medidas de autocuidado, y así evitar que Cartagena llegue a las lamentables cifras que están teniendo otras ciudades del país”, aseguró el mandatario.
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