Hoy en la capital del mundo, en New York, EE.UU., se realizó el vuelo número 51 de colombianos varados en el exterior, ello se convirtió en la felicidad para 249 colombianos, que abordaron el vuelo de Avianca, con rumbo la capital de país.
Sin embargo, para otros la cara fue de tristeza porque no pudieron volver en este vuelo comercial con fines humanitarios.
Según la cónsul de Colombia en New York, Susana Berenguer, cerca de 900 solicitudes tiene este consulado de colombianos varados y atrapados en esta área de los Estados Unidos, los cuales quieren retornar y volver a la tierra que los vio nacer
LOS ALEGRES
Hoy es uno de los días más felices en su vida para María Teresita Rivillas, esta caleña, que hoy cumple su natalicio, el número 59, había pedido de regalo de cumpleaños volver a casa, volver a Colombia y su deseo se cumplió.
Ella fue una de 249 pasajeras del vuelo comercial con fines humanitarios de Avianca 177, el cual partió desde el aeropuerto internacional John F Kennedy y llegó al aeropuerto internacional El Dorado de Bogotá hacia las 7 de la noche, hora del Este en EE.UU.
“Yo le había pedido a Dios y a la virgencita que me diera eso de regalo de cumpleaños, llegué a visitar a mi familia aquí y me quedé atrapada pero gracias a Dios ya voy devuelta casa”, dijo Rivillas Quiroz.
Esta caleña de pura cepa llamó extremadamente la atención en la terminal aérea estadounidense, debido a su traje de bioseguridad y el protocolo de autocuidado en esta terminal aérea.
“Prácticamente ya estoy en la tercera edad y hay una recomendación especial para las personas que estamos en el sexto piso y tenemos que tener un autocuidado y protección contra este virus COVID-19. Yo quiero estar mucho tiempo más con mi familia y por eso me cuido”, comentó la señora.
Otra de las caras de felicidad fue para la costeña, la monteriana María Angélica Tellos, de 24 años, quien estuvo aquí en los Estados Unidos bajo la figura de Au Pair, de intercambio cultural y sin proponérselo se convirtió en una de las jóvenes líderes de la iniciativa quiero volver a casa del grupo focal de Nueva York.
“Afortunadamente por mi formación en derecho y las ganas de trabajar unidos junto a otros colombianos que estábamos varados, aquí logramos sacar adelante esta iniciativa, en la cual manifiesto que seguiremos trabajando por ellos, por los que se quedan, estoy feliz de volver a casa después de 72 días de estar atrapada aquí por culpa del COVID-19”, sostuvo la vocera y abogada Tellos.
Los colombianos que partieron en el vuelo de hoy emularon lo que hacían las palomas mensajeras en la primera y Segunda Guerra Mundial colocando en sus maletas las maletas o equipaje mensajero textos solicitándole al gobierno nacional de un tercer vuelo que salga de Nueva York y mensajes de esperanza y fe para los colombianos que aún se quedan atrapados aquí en los Estados Unidos
LA CARA DE TRISTEZA
Para el paisita Juan Diego Franco Mosquera, de 19 años, su travesía y odisea ha ido a peor, pues al no tener feedback o comunicación directa con el consulado de Colombia en San Francisco, sin dudarlo vio una esperanza en este vuelo, que partió desde la capital del mundo. Otra razón de peso que tuvo Franco fue que su estatus legal venció hace seis días, es decir i94, acababa de expirar y su visa está en peligro de ser revocada.
El joven antioqueño tomó un vuelo que lo trajo desde California hasta New York, esperando que alguno de los 249 convocados para este vuelo comercial con fines humanitarios no llegara o cancelara a último momento. Pero no tuvo esa fortuna, su esperanza se desvaneció, pues todos llegaron a tiempo, todos quisieron llegar a casa, ahora no sabe qué hacer, si volver a California o quedarse en New York, lamentablemente en ese vuelo no hubo una silla para él.
“Yo solamente tuve comunicación con el consulado en San Francisco una sola vez, me cansé de enviar correos que no fueron respondidos, me cansé de llamar y no tener respuesta, al ver que uno de los consulados que más se mueve el de Nueva York, decidí venirme para acá a ver si puedo volver a casa, además mi i94 acaba de vencer hace seis días, no quiero perder mi visa y mucho menos mi estatus legal, le estoy pidiendo a mi gobierno que me priorice y me saque de aquí”, comentó Franco Mosquera, quien estudia Mecánica automotriz.
Otras de las caras de tristeza fue la capitalina María Camila Montalvo, quien es estudiante de maestría y tuvo que conducir 3 horas y media para llegar al aeropuerto JKF.
De acuerdo con ella, no entiende por qué no has ido priorizada, si evidenció con documentación médica, que sufre de un cuadro de asma severo y ella pertenece a la circunscripción de New York y Connecticut.
“Yo llegué al aeropuerto con la esperanza, con la fe, de que iba volver a casa, a mí no me llamaron, pero confiaba, que alguien se pudiera quedar o que alguien no llegara, sin embargo, eso no ocurrió el vuelo se cerró, aún no entiendo por qué no fui priorizada, si ya demostré mis antecedentes médicos y de mi aflicción a mis ataques de asma. Ahora debo conducir más de tres horas y media para llegar al lugar donde estoy alojándome” dijo la bogotana de 31 años.
De acuerdo, con datos suministrados por la oficina de comunicación del consulado colombiano en New York y por la misma Consul Susana Berenguer, en este vuelo iban 155 colombianos de al circunscripción de Nueva York y Connecticut, y los otros 94 restantes de los consulados de Chicago, Boston, Washington y Delawarede.
Maletas mensajeras
La nota curiosa en el vuelo número 51 colombianos atrapados en el exterior, fue que cerca de 100 maletas llevaban un mensaje pidiendo un 3 vuelo humanitario.
Igualmente en los equipajes habían mensajes con textos de solidaridad, esperanza para los que se quedan y aún siguen en esta iniciativa de #QuieroVolverAcasa para recibir la tan anhelada llamada, por parte del consulado, para abordar, un vuelo comercial con fines humanitario, para que que por fin lo lleve a casa, lo lleve a Colombia.
De acuerdo con una información suministrada por la cancillería en total han llegado y retornado al país 7058 Colombianos, quiénes estuvieron atrapados y varados en diferentes partes del mundo, en 50 vuelos comerciales con fines humanitarios, entre la primera semana de marzo hasta 26 de mayo.
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