Un año después de su condena a once años por los delitos de fraude procesal, falsa denuncia y falso testimonio, sentencia proferida por el juzgado noveno de Bogotá, se le cierra el cerco a Gisele Jaller, tras la solicitud que se elevó a la Interpol para que se emitiera una orden de captura en su contra. Aunque en la lectura de sentencia se habló del tema, hasta ahora se reactiva la solicitud, esta vez por la solicitud del juez quinto de ejecución de penas.
“Se adelantan los fines pertinentes con el fin de lograr la captura de la condenada Giselle Jaller Jabbour, quien actualmente se encuentra evadida, al parecer, fuera del país, toda vez que es requerida para que cumpla pena impuesta”, reza uno de los apartes de la petición.
En febrero de 2012, esta ciudadana libanesa fue declarada en contumacia, figura que hace referencia a que la persona será procesada en ausencia ante la no comparecencia a los estrados judiciales.
Durante su proceso se evidenció que indujo a un juez para que ordenara a una entidad financiera el pago de 20 millones de dólares por un supuesto fraude procesal y, además, se hizo pasar por la representante legal de la firma Inter Terra SAS, para que le adjudicaran millonarios contratos en las Fuerzas Militares.
En su momento, la Fiscalía argumentó ante el estrado que “Jaller Jabbour utilizó dos escrituras falsas y en ellas suplantó a su hermana Rolla Jaller para obtener estos beneficios económicos de manera delictiva”.
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