“El delito” que salió a flote después de rapto y rescate de bebé

El rapto de la bebé Allison Brigit de tres semanas de nacida copó toda la atención de las autoridades policiales, quienes se enfocaron en su rescate durante tres días. Sin embargo, el hecho de que la madre de la bebé, Katherine Gallego, tenía tan solo 14 años, pasó desapercibido.
Aunque tanto Katherine como su compañero sentimental y el padre de la niña, Jhon Villarraga, pensaron que la historia tendría un final feliz con el rescate de su bebé y la captura de la raptora, hoy los ojos están puestos sobre este joven de 27 años, denunciado por el ICBF por haber sostenido una relación sexual con una menor de 14 años.
El abogado penalista y docente de la Universidad del Rosario, Francisco Bernate, sostiene que aunque la niña hubiera sido concebida cuando Katherine ya tenía cumplidos sus 14 años, de comprobarse que Villarraga convivía con ella desde antes que alcanzar esta edad, podría ser condenado por el delito de acceso carnal abusivo con menor de 14 años.
Según la abogada Beatriz Linares, experta en temas de infancia y adolescencia, este tipo de delitos pueden dar penas hasta por 20 años de prisión. Sin embargo, para esta abogada, poner tras las rejas al padre de Allison Brigit no sería la solución, porque él es quien responde económicamente por las dos menores de edad, y privarlo de la libertad solo agravaría la situación de ambas.
Esto no quiere decir, explica Linares, que Villarraga no tenga que responder por el delito que cometió. Una sanción ejemplar sería “una libertad condicionda, es decir, vigilar cada mes el cumplimiento de que efectivamente ese padre asume su responsabilidad, que implica no solo proporcionar alimentos, sino respeto y amor”, ejemplificó.
Aunque muchos alcanzaron a pensar que ambas menores podrían quedar bajo protección del ICBF, ambos abogados sostienen que esta nunca sería una solución porque tanto la madre como la niña no están en situación de abandono y tienen un hogar. Además, porque hasta el momento no se tienen indicios de maltrato o abuso por parte de Villarraga.
LAS LECCIONES DEL CASO
Lo que saltó a la vista con este caso es que muchos jóvenes desconocen sus derechos, y que tener relaciones sexuales con un menor de 14 años es un delito grave. “Hay que explicarles a los adolescentes que están teniendo relaciones sexuales desde los 8 años y 12 años que allí hay un delito”, afirma Linares.
Según cifras del ICBF, durante el 2012 se abrieron procesos de reestablecimientos de derechos a 337 niñas menores de 14 años que estaban embarazadas. De ese total, 207 fueron reportados por la Red Unidos, 126 por la ciudadanía y solo 47 por demandas espontáneas por parte de la niña o la misma familia.
En el caso de Katherine y su hija, el abogado Francisco Bernate sostiene que su familia también podría llegar a asumir una responsabilidad penal por omisión, al no cuidar apropiadamente de una menor de 14 años, que sostenía una relación sentimental con un hombre de 27 años.
Y es que cuando se trata de menores de edad, la responsabilidad es compartida con los padres. “Este muchacho de 27 años, si hubiera tenido 13 años no tendría que responder penalmente, pero su papá, su cuidadora o la persona con la que vive si podría responder penalmente cuando se trata de una relación sexual con menor de 14 años”, explicó Beatriz Linares.
Para esta experta en derecho de infancia y adolescencia, con este caso salió a flote un problema de fondo y es cómo se les está enseñando a los menores de edad a tener relaciones sexuales. “ Aquí hay que hacer un pare y entender que no se puede enseñar a los adolescentes a tener relaciones sexuales con menores de 14 años, porque si las tienen deben asumir la responsabilidad que se llama delito”, concluyó.