El inicio de 2014 llegará con un impulso de la Reforma Tributaria, que exime de pagar las contribuciones de salud (8,5%) por cada empleado que gane 10 salarios mínimos legales vigentes o menos.
Esta reducción es complementaria también de la exención al pago de las contribuciones parafiscales del Sena y al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Icbf, que representaban un 5%. Esto ya se realiza desde julio de este año.
Los empleadores no deberán pagar los aportes a la salud de los empleados que devenguen hasta 10 salarios mínimos legales vigentes, es decir, $6 millones 602 mil.
El Director de la Política Macroeconómica del Ministerio de Hacienda, Luis Fernando Mejía, aseguró también que con los beneficios de la Reforma Tributaria “se han formalizado más de 660 mil empleos informales desde enero de 2013”.
“Como resultado de la disminución en los costos de contratación de mano de obra formal, con cifras de noviembre, el empleo formal crece a tasas de 8% anualmente, mientras el informal cae a tasas de 2%”, agregó Luis Fernando Mejía.
Mientras tanto, para el gerente general de Campesa, Alberto Alarcón, la medida “no será una reducción significativa que llame a los empresarios a crear empleo en índices muy importantes, pues serán $52 mil pesos por salario mínimo al mes, y aunque es un dinero que ya no hay que pagar, considero que el fomento y la generación de empleo se debe es a la dinámica de la economía y a la reactivación de la industria”.
Ahora bien, la financiación de los parafiscales y la salud serán pagada a través del impuesto Contribución Empresarial para la Equidad, (Cree), que será aplicado a la utilidad de las empresas.
Es por esta razón que el funcionario de la cartera de Hacienda, aseguró que durante 2014, el Gobierno Nacional espera recaudar $10 billones a través del Cree.
Sin embargo, hay que esperar a ver qué sucede en el panorama económico nacional para ofrecer un concepto sobre la medida. Además, el impacto que pueda tener en la generación de empleo está por verse.
Así lo manifestó el presidente de la constructora Marval, Rafael Marín, quien consideró que “en el corto y mediano plazo, los empleadores no veremos un cambio sustancial que nos permita creer que podemos generar más empleo, pero sí creo que con el tiempo sentiremos un alivio que podrá traducirse en oportunidades para más puestos de trabajo”, precisó.
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