Con la llegada a Colombia del exjefe paramilitar Hernán Giraldo, se empieza a cerrar un capítulo que abrió el expresidente Álvaro Uribe en 2008, con la extradición de más de 10 exjefes de las extintas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). Aún quedan tres peces gordos en territorio extranjero.
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‘Taladro’, uno de los muchos seudónimos que tuvo Giraldo, que en su momento fue el jefe del bloque ‘Resistencia Tayrona’, regresó al país tras purgar un poco más de 10 años de cárcel en Estados Unidos por el delito de narcotráfico. Al hombre se le señaló y condenó por vejámenes en contra de la población civil y sobre todo contra niñas vírgenes entre 13 y 15 años.
La sentencia de Justicia y Paz, jurisdicción a la que se acogió el entonces jefe paramilitar, lo condenó a 13 años por homicidios, desapariciones forzadas, secuestros y desplazamientos, que fueron resumidos en más de 700 hechos delictivos.
Una vez llegó a territorio nacional fue dejado a disposición de autoridades judiciales para avanzar con su proceso penal en Colombia. Fue recluido en la cárcel de Itaguí, Antioquia en la que culminará su condena.
LOS QUE FALTAN POR LLEGAR
Un panorama similar le espera a Salvatore Mancuso, Ramiro ‘Cuco’ Vanoy y Diego Fernando Murillo ‘Don Berna’, quienes aún permanecen en territorio extranjero.
El más próximo a arribar al país es Mancuso, sobre quien se tenía previsto regresara durante el segundo semestre de 2020, sin embargo, trabas en su proceso de deportación le dieron pie incluso para plantear refugiarse en Italia, de donde también es ciudadano.
Esta solicitud la elevó el exparamilitar ante las autoridades en Estados Unidos, y hasta el momento no ha tenido respuesta. Mientras que desde el Gobierno Nacional aseguran que se ha adelantado todo tipo de trámites para que regrese al país a darles la cara a las víctimas.
Mancuso purgó una pena de más de 10 años por el delito de narcotráfico en Estados Unidos, mientras que en territorio nacional aún tiene cuentas pendientes con la justicia. Sobre él pesan dos condenas por más de 1.500 actos delictivos cometidos en la zona norte del país.
Pese a que Mancuso aún no arriba a territorio nacional, las diligencias judiciales en su contra se han empezado a mover. Por ejemplo, su equipo de abogados no descartan que el otrora paramilitar obtenga el beneficio de casa por cárcel o en su defecto esté en libertad bajo fianza, esto debido a que consideran que una vez regrese al país correrá riesgo.
Mancuso, además de llegar a culminar su pena en una cárcel del país, se comprometió a reparar a las víctimas con verdad, que es una de las obligaciones que adquirió tras su paso por Justicia y Paz.
En más de una ocasión, el exjefe paramilitar desde territorio nacional ha adelantado acciones de reparación con las víctimas, a través de los mecanismos de justicia transicional que rigen desde el acuerdo final de paz entre el Gobierno y las extintas Farc.
Pese a que desde territorio extranjero ha cumplido con lo que le ordenó Justicia y Paz en su condena, Mancuso tiene un proceso judicial pendiente en Colombia que se abrió mientras permanecía recluido en Estados Unidos. De acuerdo con la Fiscalía, el exparamilitar está inmerso en lavado de activos, por los negocios que tuvo con Enilce López ‘La Gata’, en una de sus empresas de seguridad.
Si bien Mancuso también ha pedido pista en la Jurisdicción Especial para la Paz para avanzar con dicho proceso, lo que está claro por el momento es que si no es aceptado en la justicia transicional Mancuso se enfrentaría a más de 40 años de prisión, por incumplir con lo ordenado en Justicia y Paz.
La Fiscalía aseguró que Mancuso adelantó acciones irregulares con ‘La Gata’ luego de que este se hubiera desmovilizado, lo que le podría acarrear perder los beneficios.
Por otro lado, de ‘Cuco Vanoy’ se sabe que fue el exparamilitar con una de las condenas más altas en Estados Unidos. Purga una pena de 24 años y fue señalado por el Distrito del Sur de Florida de cometer delitos como narcotráfico y lavado de activos.
‘Cuco’ quien perteneció al ‘Bloque Mineros’ de las extintas AUC es señalado por el Tribunal Superior de Medellín como uno de los hombres más crueles, responsable de múltiples actos de violencia.
Pese a que a Vanoy le faltan un poco más de cinco años en territorio extranjero, a su llegada a Colombia tendrá que responder por una condena en su contra de ocho años, por responsabilidad en las masacres ocurridas en Ituango, Antioquia que se perpetraron en El Aro y La Granja.
El más reciente expediente judicial en contra de ‘Cuco’ da cuenta que fue una mano aliada del narcotráfico cuando Pablo Escobar, jefe del Cartel de Medellín empezó a mover droga hacia el extranjero, sin embargo, las extintas Farc también empezaron a mover sus álfiles, de ahí que el exparamilitar buscara a Carlos Castaño, quien finalmente terminó acogiéndolo en el grupo criminal.
‘Cuco’ impuso su poderío criminal con masacres, desplazamientos y operaciones de limpieza en unos municipios de Córdoba y Antioquia donde se disputaba el territorio con el Ejército de Liberación Nacional y las Farc.
De Vanoy se conoce que su poderío criminal en el mundo del narcotráfico no se consolidó únicamente con apoyo a actos ilegales, sino que con ayuda de gobernadores y políticos de la época pudo sacar adelante el negocio.
De ahí que en más de una ocasión sentencias emitidas contra los exparamilitares den cuenta de la denominada parapolítica, pues fueron muchos los parlamentarios que cayeron en la estrategia de recibir dinero en sus campañas para alcanzar un puesto político a cambio de favorecer las acciones criminales de las AUC.
Vanoy, por su parte, en materia de verdad y reparación debe dar cuenta sobre las mal llamadas limpiezas sociales que adelantó en las zonas que delinquía, eso sin contar las múltiples masacres que originó con el fin de obtener el dominio del territorio.
De ‘Don Berna’, de quien no se espera regrese en un poco más de 10 años al país, se sabe que purga una sentencia de 31 años de cárcel en consecuencia de la acusación de la justicia norteamericana en su contra en 2004 por tráfico de droga y lavado de activos.
‘Don Berna’ es uno de los exjefes paramilitares que luego de cumplir su condena en la justicia estadounidense tendría que ajustar las cuentas pendientes que tiene en Colombia con las víctimas, pues en Justicia y Paz las cosas para él no han terminado.
Así como con Mancuso y Cuco, Don Berna debe entregar verdad sobre los actos ilegales ocurridos mientras fungió como miembro de las autodefensas. La más reciente decisión en el país sobre el hombre es una medida de aseguramiento que impuso la Fiscalía, bajo ley 600, por el crimen del abogado Eduardo Umaña, que fue declarado de lesa humanidad.
En ese caso, según la Fiscalía, ‘Don Berna’ ha dicho que cuando Castaño cometía crímenes de este tipo “era porque recibía datos por parte de inteligencia militar, información que estaba relacionada con defensores de derechos humanos, quienes eran personas claves para las organizaciones subversivas”.
‘Don Berna’ sería el último exparamilitar en regresar al país, luego de que fue extraditado en 2008 y condenado por narcotráfico. Así como ‘Cuco’ también se enfrentó al Cartel de Medellín, y posterior a ello creó alianzas criminales con los hermanos Castaño.
En el 2.000, creó su propio bloque al que denominó ‘Nutibara’ que delinquió en gran parte de Antioquia donde generó homicidios y desapariciones forzadas. ‘Don Berna’ fue señalado como uno de los responsables de la operación ‘Orión’ que realizó el Ejército en compañía de paramilitares en la Comuna 13 de Medellín.
Igualmente, se le ha señalado de tener nexo con Santiago Uribe, hermano del expresidente Álvaro Uribe Vélez, y el grupo ilegal los ‘12 apóstoles’, quienes en conjunto serían los responsables de adelantar homicidios selectivos, desplazamientos forzados entre otros delitos por los que fue condenado en Colombia.
Con la llegada de ‘Don Berna’ al país, en alrededor de más de 10 años, se cierra el capítulo que abrió el expresidente Uribe en contra de las extintas AUC en la que los máximos jefes fueron enviados a territorio extranjero.
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