El estadio Atanasio Girardot de Medellín, que tienen una capacidad cercana a las 48.700 personas, podría llenarse completamente hasta 22 veces con el número de venezolanos que han llegado a Colombia en los últimos ocho años, producto de la crisis económica, política y social que vive el vecino país y que los ha obligado a salir a buscar nueva suerte.
Así lo demuestran las últimas cifras entregadas por la Oficina de Migración Colombia, al 30 de septiembre de 2018, que revelan el ingreso de cerca de 1.032.016 ciudadanos venezolanos, de los cuales 454.884 son mujeres, 496.413 son hombres, 339 personas en estado indefinido y, al menos, 80.380 están sin especificar.
El éxodo masivo empezó en 2010, cuando las autoridades migratorias colombianas reportaron el ingreso de 5304 venezolanos, muchos de ellos niños, jóvenes y adultos, quienes llegaron a buscar suerte y otros más usaron a Colombia como paso para llegar a un nuevo destino en en el continente.
El informe de Migración Colombia también deja ver que la situación empezó a tornarse preocupante durante 2015, luego de que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, decretará el estado de excepción, lo que aumentó el éxodo de ciudadanos.
Para ese momento, el gobierno de Juan Manuel Santos ordenó a las entidades del Estado socorrer a los venezolanos que cruzaban la frontera, así como también a los connacionales que en otra época decidieron hacer vida en el vecino país y por cuenta de la crisis estaban regresando a su país natal.
El panorama por esos días evidenciaba ‘ríos de gente’ cruzando por los cerca de 30 pasos irregulares y legales entre Colombia y Venezuela, con lo que la cifra de las autoridades nacionales empezaba a coger fuerza y alcanzaba los 10.642 venezolanos, que para 2016 siguió en crecimiento y casi que se triplicó, sobrepasando los 30.000.
El gobierno Santos ordenó en ese momento a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y Desastres (Ungrd), adecuar albergues en las zonas de frontera y entregar más de 5000 mercados, utensilios de aseo, frazadas y colchonetas, para evitar que la situación se convirtiera en una emergencia mayor.
El 2017 tampoco escapó de la migración y las cifras aumentaron en casi un 400 %, es decir, que en Colombia ya habían más de 184.087 venezolanos. Aunque algunos usaban al país como ‘escampadero’, otros más se radicaban en Bogotá, Norte de Santander, La Guajira, el Atlántico y Antioquia.
Estas zonas hoy siguen siendo las más concurridas por los venezolanos. Según el informe, hasta la fecha la capital del país tiene 238.758 venezolanos en sus calles, seguido por Norte de Santander con 151.803, La Guajira (123.7569, Atlántico (105.4599) y Antioquia (71.580).
Allí precisamente coinciden con el mayor número de muertes violentas de venezolanos, según las cifras reveladas por el Instituto Nacional de Medicina Legal. La lista la lidera Norte de Santander con 76 reportes, seguido por La Guajira (46), Atlántico (40), Arauca (30) y Bogotá (18).
De acuerdo con el instituto forense, junio de 2018 ha sido el mes donde más se han presentado acciones violentas contra los venezolanos. Las personas atacadas se encontraban entre los 18 y 28 años de edad.
A las cifras de Medicina Legal se sumó la voz del procurador General de la Nación, Fernando Carrillo Flórez, quien en días pasados exhortó al Gobierno Nacional a fomentar acciones para garantizar la protección de los venezolanos privados de la libertad en Colombia por diferentes motivos.
La advertencia la realizó el Ministerio Público luego de realizar un operativo en cuatro cárceles y tres Unidades de Reacción Inmediata (URI) de Bogotá, donde se identificó un “alto grado de vulnerabilidad” en los servicios de salud que reciben 67 hombres y 20 mujeres venezolanas.
Al evidenciar la inasistencia por parte del Gobierno venezolano, la Procuraduría exhortó al Estado colombiano para adoptar un plan especial de trabajo, que permita atender la situación de los venezolanos privados de la libertad.
Carrillo Flórez pidió hacer seguimiento a las condiciones de estos centros, entablar acciones diplomáticas para garantizar los Derechos Humanos y diseñar una estrategia para prevenir y controlar los efectos de un incremento en la población reclusa de nacionalidad venezolana.
La Procuraduría también solicitó a las autoridades penitenciarias mejorar la atención médica que actualmente se le brinda a esta población, pues la mayoría de los internos entrevistados señaló que, aunque son atendidos en medicina general, no han podido ser valorados por especialistas.
ANTES Y DESPUÉS
La historia de Colombia se partió en dos en cuanto a Migración se trata, luego de que se presentara la crisis con Venezuela. Si bien esta empezó tres años atrás, el Gobierno Nacional no conocía de hechos similares que llevaran a fomentar nuevas iniciativas para generar apoyo.
Durante el gobierno de Santos se implementó el Permiso Especial de Permanencia (PEP), con el que buscan apoyar a los venezolanos que ya se encontraban en el territorio nacional y que pretendían seguir radicados en Colombia.
Esta iniciativa no excluyó a ningún venezolano, a la fecha 415.298 ciudadanos del vecino país cuentan con este permiso especial y, al menos, 240.416 están en proceso de expedición. Con este beneficio cuentan 194.847 mujeres y 220.276 hombres.
La iniciativa implementada el año pasado tiene vigencia de 90 días prorrogables automáticamente hasta completar dos años. Una vez finalizado este término, el ciudadano venezolano deberá haber tramitado una visa ante la Cancillería o abandonar el país, ya que incurrirá en permanencia irregular.
Bogotá es la ciudad que más venezolanos tiene bajo esta iniciativa, con 112.205 ciudadanos, seguido por los departamentos de Antioquia (44.145), Norte de Santander (41.431), Atlántico (36.601) y La Guajira (25.900).
A la fecha, el PEP ha sido emitido en tres oportunidades. Dos de ellas para venezolanos que entraron de forma regular antes de la fecha y buscaban permanecer en Colombia y una tercera, que está actualmente en curso, para aquellos que se encontraban en Colombia de forma irregular y que censaron en el Registro Administrativo de Migrantes Venezolanos (RAMV), otra de las iniciativas del Gobierno Nacional.
El RAMV fue un proceso de censado en el cual se buscaba ampliar la información sobre la migración de venezolanos en el país. De acuerdo con el informe de la entidad, la información recaudada sería utilizada como insumo para la formulación y diseño de políticas acordes a la realidad nacional.
Hasta la fecha, Migración Colombia tiene un reporte de 442.462 venezolanos registrados, entre ellos 118.709 menores de 17 años, 312.318 adultos y 11.435 mayores de 60 años.
El reporte de las autoridades también da cuenta que Norte de Santander, La Guajira, Bogotá, Atlántico, Magdalena, Valle del Cauca, Cundinamarca y Santander son los lugares que registran más venezolanos registrados en el registro de migrantes.
TRÁNSITO
El estudio de Migración también reveló que entre enero y septiembre de 2018 han salido del país 919.142 venezolanos, de los cuáles 430.479 eran mujeres y 488.654 hombres.
La salida de los ciudadanos del vecino país se ha hecho por once puestos fronterizos que corresponden al Puesto Migratorio de Rumichaca, en Ipiales, el cual es el más concurrido con 511.001 reportes de salida, seguido del Aeropuerto Internacional El Dorado, con 156.507; y en tercer lugar el Puente Internacional Simón Bolívar, en Cúcuta, con 103.135 reportes.
Además, también se tiene registro del Puesto Migratorio de Paraguachón en La Guajira con 68.279 y en el Puesto Migratorio de San Miguel, en Putumayo, con 26.462 reportes de salidas.
Los países de destino de los venezolanos son Ecuador, Venezuela, Perú, Chile y Estados Unidos. A Ecuador habrían llegado 486.578 venezolanos, al menos 243.426 habrían regresado a Venezuela, 67.208 estarían en Perú, 34.533 con destino a Chile y, al menos, 23.854 viajan a los Estados Unidos.
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