Nacional no disputaba instancias definitivas desde el 2018 cuando perdió la final de la Liga con Tolima y ganó la de Copa ante Once Caldas. Ese fue su último título en Colombia. Un periodo de tiempo muy grande para un equipo de los quilates del elenco antioqueño. Lea aquí: Benzema: un año de cárcel sin cumplimiento por el “caso Valbuena”
Hoy, después de tres entrenadores, dos interinatos y dos presidentes, además de un proceso de saneamiento de las finanzas, el club llegó a otra final y lo más probable es que este miércoles, después del juego ante Pereira (8:00 p.m.) levante el trofeo número 30 de su historia, y el quinto de la Copa Colombia.
El Verde, en una noche inspirada el pasado miércoles 10 de noviembre, con goles de Nelson Palacio, Jarlan Barrera, doblete de Jéfferson Duque y otro de Álex Castro, logró un 5-0 a su favor en el duelo de ida, marcador que lo tiene muy cerca del festejo. Además, contará con un acompañamiento masivo de su público que se desplazó en caravanas a la ciudad cafetera con la ilusión de volver a gritar, ¡somos campeones otra vez!
Sin embargo, como lo dijo Francisco Nájera, asistente técnico, hay que terminar de hacer la tarea y no confiarse. “Pereira ha mostrado por qué está en estas instancias y estoy seguro de que será un rival complejo”.
Poder levantar el título es la culminación de un camino que fue de más espinas que rosas, en el que incluso una gran parte de la hinchada perdió la paciencia el semestre pasado, y confrontó a los jugadores y al cuerpo técnico en la sede de Guarne.
Cambios fundamentales
Para este semestre, después de la salida del técnico mundialista Alexandre Guimaraes, Nacional hizo la apuesta de volver a las raíces.
Primero, se trajo un presidente capacitado tras la renuncia de Juan David Pérez, quien fue el que inició el proceso de saneamiento de las finanzas, tal como lo reconoció la organización Ardila Lulle (dueña del club) mediante un comunicado agradeciendo su gestión. Le apuntaron a un antioqueño que desde joven fue a prepararse a Europa, así que Emilio Gutiérrez fue la piedra angular del actual proyecto.
La primera decisión que tomó desde la presidencia fue involucrar a dos ídolos de la historia verdolaga, el técnico Francisco “Pacho” Maturana (campeón de la Copa Libertadores 1989) y René Higuita, quien ya había estado trabajando como preparador de arqueros del club.
A Higuita los nombró líder institucional y a Maturana director de desarrollo y fútbol, además ambos harían parte del nuevo Comité de Fútbol.
Pero encontró a un grupo de jugadores con un estado de ánimo por el suelo ante el fracaso del primer semestre, además a otros temerosos por la presión de la hinchada.
Reciba noticias de El Universal desde Google News Fortalecer la parte mental
Así que otra determinación acertada fue traer al psicólogo Andrés Rodríguez quien, según sus propias palabras, trabajó en “la confianza, la motivación, la concentración, el manejo emocional, la comunicación, el liderazgo y la cohesión de equipo”.
Eso permitió a unos jugadores liberarse de la ansiedad y mejoró el rendimiento deportivo de otros que no habían marcado diferencia en esa primera parte del año, entre ellos Danovis Banguero, Baldomero Perlaza, Jarlan Barrera, Jéfferson Duque y Jonathan Álvez.
A Rodríguez también le tocó trabajar con la incertidumbre de Dorlan Pabón, Felipe Aguilar, Yeison Guzmán y Ruyeri Blanco, ante la imposibilidad del club para inscribirlos por el lío jurídico con Cortuluá debido a la transferencia de Fernando Uribe. También le puede interesar: La profecía cumplida de Silguero: Real Cartagena cumplirá 10 años en la B
Un técnico de la casa
Otra decisión acertada fue nombrar técnico en propiedad a Alejandro Restrepo, pese a la oposición de una parte de la hinchada y la prensa, que veían en él a un entrenador sin experiencia para un camerino como el de Nacional.
Alejandro, con trabajo y resultados, se encargó de darles la razón a los directivos, y también cambió la percepción sobre él. Hoy está ad portas de su primer título como técnico profesional y de meterse a la historia del club dándole el campeonato número 30. Nada asegura el éxito, pero Nacional dio pasos importantes para volver a ser protagonista en Colombia y el gran objetivo es serlo nuevamente a nivel internacional
Comentarios ()