Todos quieren ser como James, Falcao, Cuadrado, Ospina y Wílmar Barrios.
Saben que tienen dos piernas, dos brazos y el talento, así como sus ídolos. No les falta nada, solo trabajar con dedicación y esperar que llegue la oportunidad.
Así se inician todas las historias de fútbol. En una cancha, detrás de un balón niños y jóvenes corren en busca de sus sueños, que se inician muy temprano, pues desde los cuatro años comienzan a ilusionarse con ser las grandes figuras del mañana.
Desde ahí arranca una carrera que busca diariamente el crecimiento deportivo de los niños y jóvenes que le apuestan al fútbol como un proyecto de vida.
Por estos días, los futbolistas de las categorías menores regresan a entrenamientos con la firme intención de perfeccionar sus cualidades y mejorar en lo que física, técnica o tácticamente les falta para aumentar su nivel de juego.
Ellos esperan con mucha expectativa los torneos nacionales y departamentales, pues es ahí en donde compiten con todo para ayudar a ganar a sus equipos.
Andrés Felipe Redondo Cortés se abre paso en el fútbol aficionado. Tiene 8 años y se desempeña como lateral izquierdo del club Academia de Crespo.
Es hijo de Lesbia Cortés y Jorge Redondo. Vive en Manga y cursará tercero de primaria en el colegio Británico de Cartagena.
“Soy muy preciso en la marca, tengo velocidad, me va bien en el uno contra uno y poseo una buena pegada”, dice el joven que admira a James y Lionel Messi y es hincha del Barcelona de España.
Carlos Javier Baena Arias tiene 16 años y juega en Millonarios Caribe Fútbol Club. Sueña con ser futbolista profesional, se desempaña como volante ofensivo.
“Me gusta dejar servido el balón claro para que los atacantes la metan. Esa es mi mayor virtud”, dice Carlos, quien vive en Portales de Alicanto y cursa décimo grado en el colegio Institución Educativa Villa Estrella.
William Rafael Baena (q.e.p.d.) lo mira desde el cielo y le envía fuerzas. Celia Arias, su madre, le recalca que siga luchando por sus sueños.
Admira a Juan Fernando Quintero y le gusta mucho el Atlético de Madrid.
“Lo mío es el fútbol, yo quiero llegar a la profesional para ayudar a mi familia. Quisiera jugar en Millonarios y vestir los colores de la selección Colombia algún día”, comenta.
Maikle José Rodríguez Escudero pone a rodar el balón y con él las ilusiones que tiene de ser futbolista cobran fuerza.
Juega para el club Talento Barrios, es volante ofensivo, suele filtrar balones con la precisión de un reloj suizo. Está claro, es un clásico organizador de juego, tiene visión y mucha calidad.
“También hago goles, me gusta finalizar las jugadas cada vez que se pueda”, afirma Maikle, quien vive en el barrio Camino del Medio, callejón Berlín.
Tiene 15 años. Sus padres son Deivis Rodríguez y Deisys Escudero. Cursa grado once en la Institución Educativa San Juan de Damasco.
“Mi equipo favorito es Barcelona, pero admiro mucho a James y a Neymar”, recalca.
Sueña con jugar en Atlético Nacional. “Desde los 7 años me inicié en el fútbol pensando en ser futbolista profesional, Dios quiera y lo logre”, remata.
Andrés Felipe, Carlos Javier y Maikle son tres de los miles de jugadores del patio trabajando duro para cumplir el sueño de sus vidas: ser futbolista profesional.
Cartagena, sus corregimientos y los municipios de Bolívar tienen muchos jugadores talentosos. No por simple casualidad este es uno de los departamentos con más futbolistas en los diferentes clubes de Colombia.
Trabajar con disciplina, mucha dedicación, caminar por el camino correcto y tener paciencia ayudarán a estos chicos a estar más cerca de lograr su propósito.
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