¿La mejor generación de la historia?

Tal vez el título de esta nota cause cierto escozor entre los nostálgicos del béisbol colombiano, principalmente los de la ‘vieja guardia’ que vivieron los títulos mundiales de 1947 y 1965.

Pero la idea no es esa. El objetivo más que todo es reflexionar un poco sobre lo que está sucediendo con esta camada de muchachos que en menos de un mes nos han regalado dos medallas en certámenes internacionales: un bronce en el Mundial Sub-23 de México y un oro en los Juegos Panamericanos Junior que se realizan en nuestro país.

Colombia llegó a la gran final con la favorita República Dominicana, la cual nos había ganado en la fase de grupos 10-4.

Con esa referencia, los dirigidos por el mánager José Mosquera saltaron al terreno de juego del hermoso estadio Édgar Rentería de Barranquilla con la convicción de hacer historia y lo lograron.

No fue fácil porque el ‘merengue dominicano’ sonó a ritmo de güira y tambora en los tres primeros episodios en los cuales ellos ganaban 3-0.

Pero a partir del cuarto acto las cosas comenzaron a cambiar cuando Colombia tomó el ‘toro por los cuernos’ al empatar el juego con jonrón de Leandro Emiliani con Luis Castro y Carlos Arroyo en circulación.

El frenesí llegó en el sexto y séptimo con las carreras que sellaron la victoria, además con la gran ayuda del lanzador relevista Luis Moreno, quien ingresó desde el cuarto inning y solo le permitió dos incogibles a la ofensiva dominicana en los cuatro episodios que trabajó.

“Esta camada de jugadores nos darán muchas satisfacciones. Estarán en el Mundial y otros eventos internacionales. Teníamos la espinita del Mundial de México y estos muchachos se merecían una medalla de oro”, dijo el manager José Mosquera.

Por su parte, el cartagenero Manuel Esquivia, quien ofició como instructor de pitcheo de la selección Colombia indicó que “esta generación de jugadores es la mejor de la historia con el respeto de las anteriores, donde incluyo la mía. Es un grupo que viene jugando juntos hace tiempo y que tiene un gran talento. Muchos de ellos llegarán a las Grandes Ligas con sus respectivos equipos”.

Leandro Emiliani, héroe del juego final expresó: “tenemos tremendo equipo. Yo estoy seguro que en un futuro con el favor de Dios tendremos muchos Grandes Ligas”.