El lanzador barranquillero Nabil Crismatt lanzó una entrada, no recibió hits ni carreras y su equipo, los Cardenales de San Luis, venció 10 carreras por 2 a los Tigres de Detroit, en el primero de los dos juegos programados para hoy en las Grandes Ligas.
Crismatt salió en plan de relevo en la séptima entrada para ponerle la cereza al postre y así lo hizo. Cuando se juega doble programación los partidos son de siete entradas, así pues Nabil tuvo el privilegio de ponerle el cerrojo al juego.
Controló a Daz Camerron, quien bateó un elevado al jardinero derecho Lane Thomas. Al segundo bateador, Austin Romine, también lo puso fuera al batear una línea de out en el campo corto. Isaac Paredes fue el tercer bateador al que enfrentó, obligándolo a batear una rola por segunda base para sacarlo de circulación.
Nabil quien había sido bajado, fue llamado hoy al equipo grande, es un lanzador derecho que tiene alma de guerrero y sueña con brillar en las Grandes Ligas.
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