Sudáfrica, que derrotó con facilidad a Australia por 38-12, este sábado en Brisbane, y Nueva Zelanda, que se impuso a Argentina (28-13) en Hamilton, lideran el Cuatro Naciones de rugby, tras la disputa de la tercera jornada.
All Blacks y Springboks, que llevan tres triunfos cada uno en tres partidos, se enfrentan el sábado próximo (07H35 GMT) en un duelo decisivo en el Eden Park de Auckland.
Los sudafricanos son líderes, con una unidad más que Nueva Zelanda (14 a 13) debido al punto de bonificación que obtuvieron este sábado al marcar cuatro tries contra Australia.
Nueva Zelanda, que había ganado sus dos primeros partidos del torneo contra Australia, no pudo obtener ese punto de bonificación al lograr solo tres tries en su triunfo contra Argentina.
Australia y Argentina, derrotadas en las tres jornadas disputadas, intentarán salvar el honor con una victoria el próximo sábado en Perth.
Los Pumas, en su segunda participación en el torneo, han perdido sus tres primeros partidos de la presente edición, contra los Springbooks en la primera y segunda fechas y ahora frente a los All Blacks (28-13).
El neozelandés Dan Carter, que sumó diez puntos (dos penales y dos conversiones) contra Argentina, en su vuelta a los All Blacks tras mucho tiempo lesionado, se convirtió en el máximo goleador de la historia en test-matches, con 1.409 unidades.
El partido se jugó bajo una intensa lluvia y el técnico neozelandés, Steve Hansen, achacó a las condiciones meteorológicas el bajo rendimiento de su equipo.
"Se dieron muchos errores en el contacto y en ellos tuvo mucho que ver las condiciones en que se jugó. Posiblemente habríamos pateado un poco mejor también", explicó el técnico.
Los Pumas comenzaron bien el partido ya que en el minuto 5, el tercera línea Juan Manuel Leguizamón apoyó un try, que fue convertido por el apertura Nicolás Sánchez, poniendo en ventaja a Argentina (7-0).
Ese sería el único try de Argentina, que sumó sus otros seis puntos gracias a dos penales de Nicolás Sánchez.
Nueva Zelanda consiguió tres tries, dos del medio scrum Aaron Smith y uno de Julian Savea, en un partido en que Carter aportó diez puntos con dos penales y dos conversiones y Beauden Barrett tres con un penal.
Nueva Zelanda se benefició de la tarjeta amarilla recibida en el minuto 22 por el hooker argentino Eusebio Guiñazú. Los All Blacks marcaron doce puntos durante sus diez minutos de ausencia del terreno.
"Ante este tipo de rivales, cada error cuesta muy caro y hoy se dio ese caso de nuevo", explicó el capitán de los Pumas, Juan Martín Fernández Lobbe.
Nueva Zelanda ha ganado 16 de sus 17 partidos contra Argentina, empatando el restante, en 1985 en Buenos Aires (21-21).
Richie McCaw igualó al australiano George Gregan como los jugadores con más presentaciones en el torneo, con 48 partidos, pero su felicidad no pudo ser completa ya que sufrió una lesión de rodilla lesionado y se perderá lo que resta de torneo.
Por su parte, Sudáfrica tuvo un triunfo más sencillo ante Australia a la que ganó por 38-12.
Los Wallabies del nuevo seleccionador Ewen McKenzie decepcionaron ante su público sufriendo en la conquista frente a pack sudafricano fiel a su reputación, destructor.
Pese a que fue titular el creativo Quade Cooper en la apertura, asociado al medio scrum Will Genia, los australianos no encontraron brechas ante una buena defensa sudafricana.
Los Springboks marcaron cuatro tries por medio de Coenraad Oosthuizen (5), Jean De Villiers (60), Zan Kirchner (65) y Willie Le Roux (70).
El festival sudafricano lo completó la bota de Morné Steyn (18 puntos en total), con tres conversiones y cuatro penales.
Los doce puntos australianos llegaron con las patadas de Christian Leali'ifano, que anotó cuatro penales.
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