No ha sido fácil dejar las canchas para entrenar virtualmente, pero sí que ha servido para que los niños, el futuro del mañana, no pierdan la forma física y, además, fortalezcan su capacidad técnica.
Y en cuanto a los entrenamientos de menores entre 5 y 13 años, los padres han tenido que ponerse la camiseta en casa y de qué manera. A ellos, los adultos, les ha tocado hacer parte de los entrenos, pues ayudan a los mismos con los ejercicios de turno.
Los padres de familia, en primera instancia, aceptado y puesto su grano de arena para que los menores entiendan la situación que se vive por el coronavirus y a la vez se adapten a la difícil realidad.
Tatiana Patricia Barrera, administradora de Comercio Exterior, acompaña en los entrenos virtuales a su hijo Daniel Espinosa Barrera, defensa de Talentos Cartageneneros.
“Mi experiencia con los entrenos virtuales ha sido muy enriquecedora y muy positiva porque me ha permitido compartir mucho con mi hijo, conocerlo más, aprender de fútbol y ejercitarnos juntos. Nos hemos gozado los entrenos, pues la escuela brinda las herramientas necesarias para que se mantengan en forma y, además, nos han apoyado en el aspecto psicológico, tanto a niños como padres”.
Marvin Ahumada, ingeniero electrónico, también ha vivido esta experiencia. “Alan Josué, mi hijo, tiene 7 años, juega como volante ofensivo, hace parte de la Escuela Academia de Crespo y está metido en el cuento con las clases virtuales. La escuela tiene una plataforma con las guías de entreno con tres sesiones semanales, en las que se indica cuál es el objetivo que se busca en cada ejercicio”.
Ahumada asegura que este nuevo rol lo ha disfrutado muchísimo. “Entrenamos bajo cinco principios que día a día le explico: disciplina, esfuerzo, trabajo, dedicación y sacrificio. Esa es nuestra hoja de ruta. Apenas llego del trabajo me meto de lleno con él en sus actividades deportivas”.
Ana Milena Simancas también se esfuerza al máximo para ayudar a sus retoñitos en esta nueva situación. Ambos aman el fútbol y juegan en la Escuela de Fútbol Fram Pacheco Formando Campeones.
“Jhonatan (11 años) juega de volante y Andrés Felipe (5 años) es defensa. En estos momentos realizamos trabajos virtuales dirigidos por el profesor Fram Pacheco. Ahí desarrollan diferentes actividades físicas, manejo del balón y charlas educativas. Desde que inició este proceso me he comprometido en participar con ellos en cada una de las actividades, ya que su sueño es llegar lejos en el fútbol”.
Eder Moneri, papá de Juan Camilo Moneri, de la Academia Fútbol Club, asegura que “en esta pandemia nos ha tocado reinventar la forma de trabajo, tratamos de hacer una hora durante tres días a la semana con fortalecimiento físico y técnicas de fútbol. El niño está desesperado esperando que pase pronto todo esto y así regresar a las canchas”.
Pero el regreso al fútbol normal esta lejos aún, al menos así lo dio a entender en una entrevista reciente Carlos Mario Cortés, presidente de la Liga de Fútbol de Bolívar.
“Lo del torneo local será demorado, primero dependemos de los escenarios del Estado, seguramente habrá que tomar muchas medidas de bioseguridad que nuestro fútbol no podrá cumplir por ser un deporte jugado en su mayoría por estratos 1, 2, 3 y 4. Si no hay una vacuna veo hoy eso muy complicado. Cuando se dé el regreso al colegio de manera presencial estaremos un poco más cerca de retornar nosotros a las canchas”, recalcó Cortés.
De momento, las escuelas deberán seguir entrenando en casa de forma virtual con los niños, pues es la única manera para que estén en permanente actividad física y no pierdan la forma para cuando les toque regresar a las actividades normales.
Y aquí, además de los entrenadores, los papás juegan un papel sumamente importante para ayudar a que sus hijos vuelvan más fuertes. Ese será el compromiso de cada uno de los padres de familia desde el hogar.
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