El pasado informe sobre pobreza del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) ubicó a Cartagena de segunda, después de Quibdó, como ciudad con un alto porcentaje de pobreza monetaria.
De acuerdo a un nuevo resultado, Cartagena es tercera en cuanto a bajos ingresos monetarios de ciudadanos, superada por Santa Marta y Cúcuta, pero siguen preocupando los indicadores, sobre todo en pobreza extrema.
En su reciente informe, correspondiente al periodo 2016, el DANE reveló que “el porcentaje de personas en situación de pobreza monetaria en Cartagena fue de 29,1%, equivalente a 2,9 puntos porcentuales más que en 2015 (que era del 26%). Es decir, que para el 2016 en Cartagena habían un poco más de 290 mil personas viviendo en condición de pobreza monetaria”.
“Estos resultados muestran que para el último año, en la ciudad el número de personas en condición de pobreza aumentó, rompiendo con la tendencia decreciente que venía presentándose desde 2008. Además, estas cifras ubican a Cartagena por encima del promedio de Colombia, que estuvo en 28%”, destacó Cartagena Cómo Vamos sobre el informe del DANE.
Dice la organización que “mientras el costo per cápita de la canasta de bienes básica aumentó en 2016 frente a 2015, el ingreso por habitante de los cartageneros disminuyó al pasar en 2015 de $620.923 a $608.781 en 2016”.
“La ciudad con mayor porcentaje de pobreza monetaria de la Red de Ciudades Cómo Vamos en 2016 fue Santa Marta con 35,1%, seguida por Cúcuta con 33,4% y Cartagena en tercer lugar con 29,1%. Por su parte, la ciudad con menor incidencia de pobreza monetaria fue Bucaramanga con 10,6%, seguida por Bogotá (11,6%) y Medellín (14,1%). A pesar de esto, cabe destacar que tanto Bucaramanga como Bogotá aumentaron su población en condición de pobreza en relación al 2015; la de Medellín se mantuvo casi igual”, explicó María Claudia Peñas, directora de Cartagena Cómo Vamos.
Pobreza extrema
Pero lo más preocupante del informe es lo relacionado con la condición de la pobreza extrema.
De acuerdo al DANE, en 2016 el 5,5% del total de la población cartagenera (que se estima en un millón) estaba en condición de pobreza extrema, lo que representa un aumento de 1,5 puntos porcentuales con respecto a 2015. Esto quiere decir que en 2016 más de 50 mil cartageneros se encontraban en condición de miseria. Se estima que ese índice ha podido subir en 2017, incluso.
Explica Cartagena Cómo Vamos que “la línea de pobreza extrema es definida por el DANE como el costo per cápita mensual mínimo necesario para adquirir únicamente alimentos. A nivel nacional para 2016 el valor mensual por habitante, que determina si una persona se encuentra en pobreza extrema, se estableció en $114 mil”.
La ciudad con menor porcentaje de pobreza monetaria extrema de la Red de Ciudades Cómo Vamos en 2016 fue Bucaramanga con 1,2%, seguida de Pereira con 1,8% y Bogotá con 2,3%. La ciudad con mayor incidencia de pobreza extrema en 2016 fue Santa Marta con 7,1%, seguido de Cúcuta con 7,0% y Cartagena con 5,5%.
Empleo
Otro de los preocupantes indicadores que muestra el DANE son las cifras de desempleo en Cartagena, lo cual está ligado a los ingresos monetarios de las familias. Es decir, que mientras crezca el desempleo, la brecha de la pobreza monetaria y extrema seguirán creciendo.
Dice el informe que la tasa de ocupación cayó al 53.8%; mientras que la tasa de desempleo alcanzó el 9,0 %. De igual manera la tasa de informalidad se ubicó en el 54,4%
Opinan académicos
Cartagena Cómo Vamos consultó a dos especialistas en pobreza.
Daniel Toro, economista y decano de esa facultad en la Universidad Tecnológica de Bolívar, dijo que la condición de pobreza se ha agudizado por “el aumento en la inflación. Al ser más caro todo, en especial los alimentos, los que más sufren el impacto en términos de sus ingresos reales son las personas vulnerables, que están apenas por encima de la línea de pobreza. De ahí la importancia de hablar no sólo de pobreza sino de vulnerabilidad”.
El aumento de la inflación se dio por varias circunstancias, entre ellas el aumento en el precio del dólar, que encareció el año pasado las importaciones de alimentos; el fenómeno del Niño, que redujo la producción nacional, y el paro de transportadores en el 2016, precisó Toro. “En el caso específico de Cartagena, la finalización de las obras de construcción de Reficar pueden haber tenido también algún efecto”, agregó.
Para Dewin Pérez, economista y director del Observatorio al Mercado Laboral de Cartagena, “hay factores estructurales que nos mantienen en porcentajes altos de pobreza y cuando avanzamos, el cambio ha sido marginal. La dimensión laboral y educativa, al igual que la estructura productiva, se constituyen en frenos hacia la baja o factores de expansión”.
Agregó que “el 2016 fue malo en términos de empleo. Se impuso la precariedad laboral y la informalidad. El crecimiento local no le pega al empleo, que es la medida mas importante para apuntarle a la generación de ingresos”.
Los resultados de la pobreza monetaria y la pobreza monetaria extrema en Cartagena para 2016 se podrían explicar en parte por el comportamiento de la inflación en el año pasado. Además, la tasa de ocupación para la ciudad disminuyó al pasar de 55,1 en 2015 a 53,8, así mismo la tasa de desempleo estuvo en 9,0 mientras en 2015 fue de 8,7.
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