No los defraudaré, se los juro: William Dau, nuevo alcalde de Cartagena

Los cartageneros escogieron a William Dau para que sea el alcalde de la ciudad desde el primero de enero próximo. Con 112.796 votos dio la sorpresa.
- Oct 28 - 12:00 am

Unas hojas de papel, unos marcadores y el uso, en toda su expresión, de las redes sociales fueron el principio de un movimiento llamado Salvemos a Cartagena, que creció de forma inusitada y se tomó el mismísimo Palacio de La Aduana, con una promulgada lucha contra la corrupción.

Un movimiento apoyado en su mayoría por jóvenes, esos mismos que ayer a las 7 de la noche esperaban a que su líder, un tal William Dau Chamatt, llegara a la plaza de La Paz, junto a la Torre del Reloj, en el Centro Histórico.
Entre esos estaba Armando Córdoba, el olayero que decidió en las últimas semanas hacerse a un lado en la contienda por la Alcaldía y apoyar el movimiento ciudadano de Dau. Ondeando una bandera de Cartagena celebraba a todo pulmón los 112.796 (29,07%) con los que el abogado Dau Chamatt ganó la Alcaldía, siendo el “palo” y sobrepasando de forma contundente a quien muchos creían sería el nuevo alcalde de Cartagena:William García Tirado (partido Colombia Justa Libres), quien obtuvo 101.141 votos (26,06%).

Las manecillas del reloj público aún no marcaban las 7 de la noche cuando uno de los buses de Transcaribe empezó a pitar insistentemente, llevando el ritmo de los manifestantes, quienes se volcaron junto al vehículo y empezaron a celebrar la acción del conductor.
Solo unos instantes después, apareció William, “el bueno”, como él mismo se autodenominó cuando alentaba a sus seguidores a votar. La masa de jóvenes enloqueció y se escuchó al unísono el himno nacional. “Rompimos las cadenas de la corrupción”, fue lo primero que dijo Dau a sus seguidores, mientras abrazaba a Armando Córdoba. La muchedumbre se agolpó junto a ellos y fluyeron las arengas.

Entre apretones y empujones, el tumulto empujó a Dau, cruzando uno de los arcos de la Torre del Reloj, pasando por la plaza de Los Coches y llevándolo a pie hasta la plaza de La Aduana. Allí, frente al Palacio de La Aduana y sin un esquema de seguridad, alzaron en brazos al líder del movimiento Salvemos a Cartagena, cuya campaña se basó en una lucha implacable contra la corrupción y que confesó que a su plan de gobierno le faltaban muchas cosas porque hace poco llegó de Estados Unidos y tuvo poco tiempo para plasmarlo en el papel, concentrándose más “en el principal problema que tiene Cartagena: la corrupción”.

 

Primer discurso
Los seguidores de Dau lo llevaron en brazos y luego lo bajaron para que estuviera en pie en una improvisada tarima que pusieron junto a la estatua de Cristóbal Colón, en la misma Aduana. Allí, el evidente cansancio y el osado recorrido, lo vencieron, reconociendo que, sin querer, había recibido golpes y empujones.

Luego, junto a su equipo de campaña, entró al local donde funciona Hard Rock Café, donde tuvieron que cerrar las puertas para que el tumulto de seguidores se escurriera. Luego, agarró las barandas de uno de los balcones del negocio, mientras cerca de 300 personas coreaban su nombre desde abajo, en la plaza.

Tomó un micrófono conectado a un pequeño parlante y desde allí, como si fuese el palco de la misma alcaldía, empezó su corto discurso. 
“Rompimos las cadenas”, dijo mientras el reloj marcaba las 7:20 de la noche. Intentó seguir, pero la multitud entonó nuevamente el himno de Colombia y las lágrimas lo arroparon. 

“Cartageneros los amo, gracias por la confianza. Rompimos las cadenas y vamos a asaltar a Cartagena, vamos a acabar la pobreza, vamos a dar tranquilidad y progreso. Vamos a gobernar con los mejores de aquí, con los talentos. Les pido que me disculpen porque no soy político y no estoy acostumbrado a hablar en público. Anoche decía que no solo íbamos a ganar, sino que íbamos a tener una victoria aplastante. Gracias al apoyo a nuestra gerencia y en especial de la juventud. Somos la noticia política en toda Colombia, no más inestabilidad, pues ahora vamos a tener un alcalde por cuatro años. Abajo los malandrines”, dijo, con la garganta agraviada por los gritos de victoria.

Dio paso a Armando Córdoba, quien a su lado señaló: “Esta no es la elección de un alcalde. Hoy empezó la rebelión en contra de  los corruptos. Hay un alcalde para la gente, no para los financistas, que hoy fueron derrotados”. 

Y Dau agregó para sus seguidores: “Esta noche es de ustedes, les juro que no los voy a defraudar. Reynaldo Julio coordinó en mi campaña a los testigos y gracias a él hoy no nos robaron las elecciones. Y levanto la mano de Cinthia Amador, mi gerente de campaña, quien hace más de un año estuvo conmigo y fue la única que creyó en mí. Mientras consigo novia, Cinthia va a ser la primera dama de Cartagena”. Se refiere Dau a una mujer humilde, administradora de empresas, que vive en el barrio El Reposo, quien prefirió no hablar y no pudo contener las lágrimas minutos después, cuando Dau decía que otros candidatos no la hubiesen puesto como jefe de campaña.

Dau dijo que desde la próxima semana empezará a trabajar en conformar un equipo “cazatalentos”, con el que escoger las hojas de vida de todos aquellos cartageneros que quieran trabajar junto a él. No se mordió la lengua cuando le preguntaron cómo sería su relación con el gobernador electo, Vicente Blel Scaff. “Veo difícil la relación con el gobernador luego de esos audios”, dijo el nuevo alcalde de Cartagena, una ciudad que vio ayer cómo los comicios tuvieron un 45% de abstención, pues, de los 797.343 personas que estaban habilitadas para votar, solo fueron a las urnas 439.140.

 

Voto en blanco, otra sorpresa

Otra de las sorpresas en la contienda por la Alcaldía de Cartagena la dio el voto en blanco, que pese a que sus impulsores empezaron una campaña de forma tardía, se trepó en el tercer puesto con una considerable suma de 60.640 votos, teniendo en cuenta, por ejemplo, que en las pasadas elecciones atípicas Antonio Quinto Guerra fue elegido alcalde con poco más de 70 mil votos. 

En cuarto lugar quedó Yolanda Wong, con 43.777 votos (11,28%), seguida por Sergio Londoño, con 20.189 (5,20%); Fernando Araújo Perdomo, 17.631 (4,54%);Jaime Hernández Amín, 8.704 (2,24%);Nabil Báladi Gedeón, 5.854 (1,50%); Wilman Herrera Imitola, 5.054 (1,30%); Armando Córdoba, 4.035 (1,03%); Adelina Covo, 2.161 (0,55%); Minerva Romero, 1.837 (0,47%); Germán Viana, 1.759 (0,45%); Claudia Fadul Rosa, 1.728 (0,44%); y Rosmery Torres, con 721 votos (0,18%). 

Según la Registraduría, hasta ayer, al cierre de esta edición, se había revisado 2.298 mesas de votación de las 2.315 dispuestas en Cartagena y sus corregimientos para los comicios (99,26%). Así mismo, los informes indican que de los 797.343 personas habilitadas para votar, unas 439.140 fueron a las urnas a ejercer su derecho. La Registraduría contabilizó unos 392.391 votos válidos (89,35%), mientras que nulos fueron 7.978 (1,81%), y no marcados 38.771 (8,82%).