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Al finalizar el 2019, el aeropuerto Internacional Rafael Núñez de Cartagena habría movilizado al menos 6 millones de pasajeros, confirmando la tendencia de los últimos años de un crecimiento real promedio anual de 500 mil pasajeros.

Esa proyección confirma que el de Cartagena es el tercer aeropuerto del país con mayor movimiento de pasajeros, solo superado por El Dorado (Bogotá) y el José María Córdova (Rionegro, que sirve a Medellín).

Pero esa cifra, más allá de alegrar a la comunidad aeroportuaria, empieza a preocupar a las directivas de SACSA, el operador del Rafael Núñez; a las compañías aéreas y a los propios usuarios del terminal aéreo, pues la demanda de los pasajeros podría superar antes de lo previsto la capacidad actual del aeropuerto, sin que a la fecha de cierre de esta nota la ANI, la Agencia Nacional de Infraestructura, haya decidido la factibilidad de una APP de iniciativa privada que fue presentada hace largos meses. Esa propuesta aún sigue en evaluación y permitiría una segunda ampliación de esas instalaciones con inversiones que ascienden a 546 mil millones de pesos, para adecuar todas sus áreas, y poder atender 8,5 millones de pasajeros hacia 2024.

Y es que el Rafael Núñez empieza a evidenciar saturación en su terminal de pasajeros en horas pico, y de no haber una pronta intervención las incomodidades para los usuarios se harán evidentes.

Ah, pero hay algo más preocupante aún, en menos de un año la concesión actual que tiene SACSA vence y de no asegurarse la ampliación de esa concesión, con sus respectivas inversiones, el terminal pasaría a manos de Aerocivil y ello retrasa aún más una solución.

De la ANI se espera que en noviembre apruebe o desapruebe la factibilidad. De ser positiva la factibilidad, la adjudicación del nuevo contrato se daría en los primeros 5 meses de 2020, si no hubiese más interesados en participar de esa iniciativa.

La etapa de preconstrucción de esa eventual ampliación tomaría 2 años (2020 y 2021) y las obras estrían listas en 2024. Algunas de esas obras son: un nuevo muelle internacional con 5 puentes de abordaje directo y proyección para 4 más, una pista de carreteo que permitiría mayor agilidad a las operaciones aeroportuarias, más áreas de parqueadero, nuevos módulos de atención para las aerolíneas y más espacio en el muelle nacional.

Ciudadela Aeroportuaria

Una segunda iniciativa, también en fase de evaluación de factibilidad, cursa ante la ANI y ésta para un nuevo aeropuerto. Se trata del proyecto de la Ciudadela Aeroportuaria Cartagena de Indias, liderada por las firmas Odinsa y Conecta Caribe, que pretende invertir 800 millones de dólares en un megaproyecto cerca al corregimiento de Bayunca, en un área de 600 hectáreas. La pista de ese aeropuerto tendría una extensión de 3.100 metros, se habilitarían para iniciar 11 posiciones de embarque con puentes de abordaje directo y un terminal de pasajeros inicial de 71 mil m2 para atender 11 millones de pasajeros anuales, en los primeros años de operación. La concesión planteada sería por 30 años, prorrogables.

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2020, año para que ‘aterricen’ Las decisiones aeroportuarias
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