El Ministerio del Trabajo define las prácticas laborales como “una actividad formativa realizada en un escenario de trabajo real, que implica la exposición del estudiante a factores de riesgo propios de una actividad laboral”.
En palabras más simples, es la aplicación de todos los conocimientos y aptitudes adquiridas durante los estudios, y en algunos casos, el primer contacto que tiene un estudiante con el mundo laboral
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“Las prácticas son trascendentales en el proceso de formación porque permiten desarrollar habilidades, destrezas, capacidades y competencias útiles para estudiar, analizar, diagnosticar, planificar, sugerir, evaluar, actuar e intervenir en la formulación de alternativas de solución a problemas de la vida real, desde una dimensión profesional”, explica Milton Cabrera, profesor titular y coordinador de prácticas profesionales de la Universidad de Cartagena.
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Cabrera resume en estos cinco puntos las claves para poder aprovechar al máximo las prácticas laborales.
1. Pertinencia
Saber elegir el escenario de prácticas es fundamental para que el estudiante pueda dar lo mejor de sí mientras las esté realizando.
“Para ello es recomendable que el estudiante estructure su propio perfil profesional, en el que se evidencien sus competencias, habilidades e intereses vocacionales. Esto es, hacerse y responder las preguntas ¿qué sé hacer? y ¿en qué áreas específicas me sentiría bien haciéndolo? Lo ideal, entonces, es encontrar un escenario (empresa o institución) en el que se concilien esos dos elementos”, explica Cabrera.
También, para evitar “sorpresas desagradables”, recomienda que antes de participar en procesos de selección se conozcan las funciones específicas para las cuales se requerirían sus servicios.
2. Entusiasmo
Una vez elegido el campo de prácticas, la actitud es primordial para asumir el reto que se avecina, el cual requiere entrega y disposición por parte del estudiante que entrará a ser parte de una nueva dinámica laboral.
Para ello es importante que esté atento a las instrucciones iniciales, presto a preguntar y aprender lo que se necesite para desempeñar las funciones de su cargo.
3. Compromiso
Ya teniendo claras las actividades inherentes a su puesto, el practicante debe demostrar capacidad de enfrentar el mundo laboral ejecutando las tareas que se le asignan de acuerdo a lo aprendido en sus estudios.
4. Responsabilidad
La responsabilidad es necesaria para atender con eficacia cada función asumida tanto individualmente como en equipo y así demostrar que está apto para realizar las actividades que le encomendaron.
5. Iniciativa
Durante las prácticas también es importante tener una actitud propositiva y atreverse a lanzar ideas más allá de lo que pide el campo de prácticas. Dar la “milla extra”, es fundamental para el aprendizaje del mismo estudiante e incluso le da posibilidades de vinculación laboral.
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Cabrera señala que las prácticas laborales pueden ser de diversos tipos según el campo en el que se den: las hay empresariales en organizaciones o instituciones; de consultoría; sociales; pedagógicas; o internacionales.
También están las pasantías, que corresponden al desarrollo de estrategias de intervención, como los proyectos organizacionales, proyectos de investigación y servicios sociales.
Lo importante es que el estudiante defina cual de estos tipos se ajusta más a su perfil de manera que su elección sea consecuente a lo que aspira a realizar durante sus prácticas.
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