Gracias a que celebridades como Lady Gaga, Selena Gómez y recientemente, Sandra Bullock, han compartido su experiencia, el burnout o en español, el síndrome de agotamiento profesional, ha ganado popularidad en las redes sociales y cada vez hay más personas comentando sus historias en las plataformas digitales.
Pese a la sensación de novedad del burnout, este síndrome fue caracterizado desde principios de los años 70 por el sicólogo estadounidense Herbert Freudenberger , quien lo describió como “una sensación de fracaso y una existencia agotada o gastada, que resultaba de una sobrecarga por exigencias de energías, recursos personales o fuerza espiritual del trabajador”, según reseña una publicación de la Universidad Anáhuac (México).
Desde principios de siglo, la Organización Mundial de la Salud lo reconoce como un factor de riesgo para los trabajadores y, en años recientes, lo incluyó en la 11ª Revisión de la Clasificación Internacional de Enfermedades como un fenómeno ocupacional, pero resaltó que no es una condición médica y que el término no debe aplicarse para situaciones por fuera del ambiente laboral. Le puede interesar: Evite contraer estas cinco lesiones en el trabajo y cuide su salud.
“El burnout es resultado de un estrés laboral crónico que no se ha manejado de forma exitosa y se caracteriza por la sensación de agotamiento, falta de energía, sentimientos negativos relacionados con las actividades laborales y una reducción del eficacia laboral”, indica la organización de salud.
Especialistas coinciden en que el aumento de la carga laboral, la tensión en el ambiente de trabajo, poca atención a las necesidades de los trabajadores, autoexigencia y la inestabilidad profesional son factores determinantes para experimentar el burnout.
Este síndrome se manifiesta a nivel físico con dolores de cabeza, dolor de espalda, insomnio, presión en el pecho, entre otros síntomas; y a nivel emocional con irritabilidad, depresión, frustración y sentimientos de impotencia.
Es por lo anterior, que aunque el agotamiento profesional no es una enfermedad en sí misma, sí puede desencadenar enfermedades físicas o mentales, que para ser tratadas de manera adecuada, se necesita identificar la causa en el ambiente laboral. Lea también: Síndrome de la vida ocupada: autoexigencia e hiperestimulación laboral.
Buscar atención médica y mental, hacer ejercicio, meditar, dormir bien, revisar las posibilidades de mejorar las condiciones en el ambiente de trabajo o incluso, buscar otro empleo, son algunas de las recomendaciones para superar los episodios de agotamiento profesional.
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