Después de recorrer durante siete horas las diferentes calles y avenidas de Barranquilla el Joe Arroyo fue sepultado ayer a los 11 de la noche en Jardines de La Eternidad.
El féretro salió a las 4:00 de la tarde de la Catedral Metropolitana de Barranquilla embarcado en un vehículo del Cuerpo de Bomberos que a paso lento fue transitando por las calles de la capital del Atlántico.
Los seguidores que se apostaron en las aceras le tiraban flores a medida que pasaban por donde ellos estaban.
Una llovizna también acompañó el cortejo fúnebre y muchos pensaron que el cielo también estaba llorando la partida del más grande interprete de la música tropical en Colombia.
Fueron siete horas en que las más de 30 mil personas y cerca de tres mil vehículos acompañaron al Joe hacia su última morada.
Cuando el féretro ingresó al cementerio, las más de tres mil personas que lo esperaban desde tempranas horas de la tarde gritaban: “Joe, Joe, Joe”.
Fue una situación apoteósica que hizo brotar más de una lágrima a los asistentes.
De noche, como siempre vivió su vida, y entonando la canción ‘Centurión de la Noche’ el pueblo colombiano le dio el último adiós a Álvaro José Arroyo González, al Gran Joe Arroyo.
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