La música definitivamente no tiene fronteras y en eso se respalda el “Hallyu”, un término proveniente de Corea y que hace alusión al entretenimiento y cultura de esa nación como un completo producto de exportación.
Al usar la palabra “Hallyu”, se define literalmente “Ola coreana”, es decir, se hace referencia al suceso del entretenimiento de Corea a nivel global, y allí está ubicado el K-pop, el mayor representante de esa ola en el mundo.
En ese mismo contexto se ubica 3YE la Girl Band de K-Pop formada por Yuji, Yurim y Haeun, talentosas y con grandes dotes de baile y voz, que llegarán a Latinoamérica para brindar un mega show el próximo sábado 31 de julio, mediante www.masvivo.tv.
3YE hicieron su debut en mayo de 2019 con el single digital “DMT” con el que lograron una gran repercusión. En un momento determinado, la banda se desvió del estereotipo de los grupos de chicas existentes en ese momento y difundió sus colores propios, con una perspectiva e interpretación diferente de la escena tradicional.
Con “Oomm”, en septiembre de 2019, “Queen” en febrero de 2020 y el primer mini álbum “Triangle” en abril de 2020, se ganaron definitivamente el amor de los fanáticos del K-Pop en todo el mundo, quienes se sintieron atraídos por sus interpretaciones, coreografías y, definitivamente, su belleza oriental.
En 2019, 3YE ganó el premio a “Rookie del año” en los Ky Star Awards y ese mismo año lo coronaron con el Sharing News Chairman’s Award en la 14° edición de Korea Sharing Special Awards. Actualmente la banda se encuentra presentando el single “Stalker”, lanzado a nivel global en abril de 2021.
La revolución del K-pop
Para conocer un poco más de este movimiento, cabe aclarar que generalmente se trata de grupos de chicas y chicos jóvenes que surgen de realities shows o audiciones y debutan oficialmente tras un entrenamiento exhaustivo que puede durar hasta 10 años.
Los artistas de K-pop son conocidos en el mundo entero por sus coordinadas coreografías, cuidada estética y adictivas canciones. Sus conceptos suelen variar de poderosas performances de Hip Hop, potentes presentaciones con influencia del rock, hasta frescas y juveniles melodías pop.
Hablar de un punto de inicio en Latinoamérica es bastante difuso, pero se puede suponer que los primeros indicios de un fanatismo por el K-pop empezó a través de la plataforma de juego “Pumpit UP”.
El juego de baile, incluía entre sus opciones, muchísimas canciones de aquel K-pop que dio origen al género en los años 90 con grupos como H.O.T, S.E.S y Seo Taiji and Boys. Fue alrededor del 2008, cuando los primeros fans del K-pop comenzaron a hacerse ver en eventos y reuniones, donde proyectaban los videos de los grupos del momento: Wonder Girls, Girls’ Generation, TVXQ, Big Bang, SHINee y Súper Junior, que llevaban la delantera.
El K-pop no paraba de crecer y generar nuevos seguidores, deseosos de mostrar que fenómeno se vivía con mucha pasión. Pronto se dio el primer concierto de K-pop en Latinoamérica, el trío JYJ, ex integrantes de TVXQ, realizó su presentación en Chile. Gracias al éxito de esa gira México, Chile y Perú, las agencias coreanas sumaron más países latinos en sus siguientes tours.
En el 2013, el famoso grupo Súper Junior pisó por primera vez Buenos Aires y se presentó en el emblemático Luna Park, a partir de ese momento el K-pop no hizo más que crecer en América Latina. El más reciente fenómeno del género es el grupo masculino BTS quien llenó el estadio Allianz Parque en San Pablo, Brasil, con 100 mil asistentes en sus dos fechas.
Hoy en día el K-pop está tan globalizado que hablar de un fenómeno es reducirlo. Grupos como EXO, BTS, Blackpink y TWICE ya son tan populares como algunas estrellas pop estadounidenses. Corea está en la punta de la ola y el K-pop es una realidad.
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