Aunque fue fundada en Bogotá, KMA Construcciones centra los esfuerzos de su plan de responsabilidad social empresarial en Cartagena. La razón: sus fundadores son cartageneros y conocen de primera mano las necesidades de sus coterráneos.
Karina Amín, vicepresidenta de Asuntos Corporativos de KMA, explica que “hace 18 años mi hermano y yo fundamos esta empresa en Bogotá pero regresamos a Cartagena con el fin de ofrecer empleo y aportar un granito de arena a la construcción de ciudad desde la educación de niños y niñas de escasos recursos”.
En 2010 comenzaron apoyando la educación de 10 niños del municipio de Santa Catalina y hoy son 150 los que cursan preescolar y primaria en el colegio María Reina de la Paz.
El gran objetivo de esta empresa creada por cartageneros es construir un colegio en Santa Catalina, equipado con salón de tecnología, canchas deportivas y todos los instrumentos necesarios para la educación integral de los niños.
Más programas
Pero las acciones de KMA a favor de las futuras generaciones cartagenera no se limitan a la labor que desarrollan en Santa Catalina sino que también apadrinan el programa Talitha Qum de la Arquidiócesis de Cartagena, dirigida a niñas y adolescentes vulnerables.
“Se trata de niñas que viven alrededor de la Ciénega de la Virgen y el objetivo es protegerlas de su contexto social con una formación integral que incluye catequesis, actividades de artes, manualidades y apoyo sicológico”, explica la vicepresidenta de Asuntos Corporativos de KMA.
Este programa cuenta con tres sedes en los barrios San Francisco, La María y La Candelaria y el objetivo es abrir otras a lo largo de Ciénega de la Virgen, hasta llegar a El Pozón.
Alimentos durante la pandemia
Conscientes del gran impacto que representa la emergencia por el coronavirus para cientos de familias que se dependen del turismo o incluso trabajan en la informalidad, KMA se unió al Banco de Alimentos para llevar víveres a las familias más necesitadas.
Desde el inicio de la pandemia ha entregado más de 8.500 mercado en varios barrios de Cartagena así como en la zona insular y municipios. En Sucre, Córdoba y poblaciones de Bolívar también se han entregado este tipo de ayudas, sumando más de 10.000 canastas básicas y elementos de primera necesidad.
“En esta primera etapa estamos concentrado en ayudar en las necesidades urgentes, ahora que se regrese a la nueva realidad, que no será fácil, queremos enfocar nuestro apoyo en el área de educación para fortalecer el futuro de los niños cartageneros”, finaliza Amín.
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