En el primer trimestre de 2021 el Gobierno avanzó en el control de la deforestación en Yarí Sur y El Camuya, en el departamento de Caquetá, y Calamar-Miraflores, en Guaviare. Lugares gravemente afectados por este fenómeno.
Esto se logró gracias al trabajo del Consejo Nacional de Lucha Contra la Deforestación (Conaldef), quien ha formulado estrategias para la protección de los bosques como la campaña Artemisa, que mediante un trabajo articulado ha logrado el control de 14.238 hectáreas de bosque que habían sido deforestados.
Esta campaña ha tenido resultados positivos gracias a la información satelital generada por el Sistema de Monitoreo de Bosques, que con imágenes de los satélites Sentinel, Landsat y Planet Scope, no solo identifican la ubicación geográfica de las zonas que están siendo objeto de deforestación, sino que suministra un análisis multitemporal del proceso de pérdida a través de reportes semanales y trimestrales de detecciones tempranas en tiempo casi real.
Algunas de las zonas con alta deforestación que lograron ser controladas gracias a las acciones del Conaldef y en el marco de la campaña Artemisa son el Parque Nacional Natural Tinigua (Meta), el Parque Nacional Natural Sierra de La Macarena (Meta), la Zona de Reserva Forestal Amazonía y el Parque Nacional Natural Serranía de Chiribiquete (Caquetá-Guaviare).