El Ministerio de Salud informó este lunes que hubo un leve incremento en la cantidad de nuevos casos de COVID-19 con relación a la pasada semana, pero que aún no se puede hablar del inicio de una cuarta ola en Bolivia.
El ministro de Salud, Jeyson Auza, sostuvo que en la semana epidemiológica 39 se registraron 549 casos más que la semana pasada haciendo un total de 2.389 casos de COVID-19 reportados en la última semana.
“Después de 15 semanas de desescalada hoy presentamos un incremento del 30 % en el país”, explicó Auza citado en un boletín.
El ministro enfatizó que este aumento de casos no es significativo o una “tendencia de crecimiento” que pueda suponer que se trata del comienzo de una cuarta ola en el país.
Los departamentos que registraron un aumento de casos son la oriental Santa Cruz, la amazónica Beni, la altiplánica Oruro y Cochabamba, entre los principales, según el comunicado.
Mientras que las regiones que bajaron en la cantidad de casos de COVID-19 está la altiplánica Potosí y Chuquisaca.
Reciba noticias de El Universal desde Google News Auza recomendó a la población ir a los puntos de vacunación para inmunizarse contra la COVID-19 y mantener las medidas como el lavado de manos y el uso de la mascarilla.
El ministro destacó que el proceso de inmunización en el país ya cuenta con un 60 % de la población vacunable con la primera dosis, mientras que un 47,3 % tiene el esquema completo de vacunación.
Bolivia acumula 501.362 casos de COVID-19 y 18.764 fallecidos, desde que se identificaron los primeros contagios en marzo del año pasado.
Hasta ahora son 3.433.980 personas que cuentan con la primera dosis, 2.517.912 cuentan con el plan de vacunación completa y 877.040 fueron vacunados con la Janssen que es unidosis.
Las vacunas que se aplican en Bolivia son las del tipo Sinopharm y Sputnik V, adquiridas mediante compras gubernamentales, mientras que los inmunizantes AstraZeneca, Pfizer y Janssen llegaron al país mediante donaciones canalizadas por el mecanismo Covax de las Naciones Unidas.
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