Los editores de la prensa francesa mostraron este martes su preocupación al jefe del Gobierno, el primer ministro Jean Castex, por “la multiplicación de iniciativas legislativas” que buscan sancionar a la prensa y en vista de la aprobación de la llamada ley de Seguridad Global.
“Constatamos con preocupación la multiplicación de iniciativas legislativas y políticas susceptibles de atentar contra la libertad de prensa, fundamental en nuestra profesión pero sobre todo en la vida democrática”, escriben varias asociaciones del gremio en una carta enviada a Castex.
La carta va firmada por los presidentes de la Alianza de Prensa, que representa a diarios regionales y nacionales; SEPM, que agrupa a las revistas; SPIIL (webs de información), y la federación que agrupa a la prensa especializada (FNPS), en el marco de una serie de movilizaciones gremiales contra el artículo de la mencionada ley, que penalizará la difusión “malintencionada” de fotos de policías.
Un punto que preocupa en particular por dejar espacio a ambigüedades.
“El carácter vago y potencialmente amplio de la incriminación tendría efectos perniciosos en el trabajo periodístico y editorial”, indican las organizaciones en la carta a Castex.
En ella recuerdan que la Defensora de Derechos (Defensora del Pueblo, Claire Hédon) apoya retirar dicha disposición, y apuntó además que la información y la publicación de imágenes de las intervenciones policiales son “legítimas y necesarias para el funcionamiento democrático”.
Los editores señalaron que comparten la preocupación de los poderes públicos por “la eficacia de la lucha contra el terrorismo y la protección de las fuerzas del orden”, pero insistieron en que para ello no hace falta perjudicar “las condiciones en el ejercicio de la profesión de periodista”.
La misiva, acompañada de un comunicado de prensa, fue lanzada horas antes de que la Asamblea Nacional vote esta tarde el proyecto de ley de Seguridad Global, que después pasaría al Senado en enero.
Otras disposiciones han levantado polémica como el uso de drones y cámaras callejeras para facilitar el reconocimiento facial por parte de la policía, lo que preocupa a organizaciones de derechos humanos.
Su votación coincide además con la polémica este martes por la violenta evacuación de varios cientos de migrantes, militantes y periodistas de la céntrica Plaza de la República en París, en la que se habían asentado para protestar por la falta de alojamiento a refugiados y migrantes en espera de papeles.
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