El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó hoy a la Fuerza Armada responder con "plomo" a "los grupos terroristas" que asaltaron en días pasados un cuartel de la Guardia Nacional Bolivariana, del que un grupo de hombres armados liderado por el expolicía Óscar Pérez se llevó armamento.
"Ataque terrorista de una unidad mandada desde Miami a un núcleo de la Guardia Nacional y el robo de un grupo de fusiles, y el anuncio de que van al ataque. Donde se aparezcan le he ordenado a la Fuerza Armada ¡plomo con los grupos terroristas! ¡Plomo con ellos, compadre!", dijo Maduro en una reunión con alcaldes y gobernadores.
Pérez -en la clandestinidad desde que lanzó en julio varias granadas desde un helicóptero de la Policía científica contra dos edificios gubernamentales en Caracas- reivindicó el ataque en un vídeo donde se ve a sus hombres sometiendo a los guardias nacionales mientras él recrimina a los militares su apoyo al Gobierno.
"¿Por qué siguen defendiendo a unos narcotraficantes, a unos terroristas de verdad? (...) Sean dignos del uniforme que tienen puesto. Son unos irresponsables, unos traidores a la patria por no hacer algo", les increpa Pérez antes de quitarse el pasamontañas.
Maduro pidió "tolerancia cero con los grupos terroristas que amenazan con armas la paz de la República", y agregó: "¿Qué se cree esa gente, que puede asaltar un núcleo de la Fuerza Armada, robarse unos fusiles y amenazar la democracia y van a ser tolerados?"
"Cero tolerancia, con la Constitución en la mano", repitió el jefe de la Revolución Bolivariana, que encuadró lo sucedido en una cadena de "ataques por órdenes del Gobierno de los Estados Unidos".
Otros dos "ataques" ordenados por Washington son, según Maduro, el intento el viernes por parte de una ONG de embarcar en un avión con destino a Perú a unos 120 niños venezolanos que iban a reencontrarse con sus padres emigrados a ese país y el apagón eléctrico ocurrido este lunes en Caracas y dos estados vecinos.
"Afortunadamente la Fiscalía actuó rápido. Están presos los responsables y estamos buscando a los responsables internacionales y los vamos a solicitar por código rojo (de Interpol)", declaró Maduro.
Las autoridades venezolanas impidieron volar a los niños al identificar irregularidades en algunos de los documentos de viaje de una decena de los menores. Los responsables de la ONG que viajaban con los niños fueron detenidos por un posible delito de "trata de menores".
La actuación del Gobierno venezolano ha sido duramente criticada por la oposición y grupos de la sociedad civil, que la consideran un atropello de los "derechos humanos" de los niños que iban a reunirse con sus padres y la han denunciado ante instituciones internacionales.
El último de estos "ataques" señalados por Maduro es el apagón que dejó varias horas sin luz a sectores enteros de la capital del país y de los estados vecinos de Vargas y Miranda.
"Luego, el ataque al sistema eléctrico ayer. Ordené una investigación yo, personal, y he demostrado con hechos en la mano que el ataque al sistema eléctrico que le da electricidad a Miranda, Caracas y Vargas forma parte de este ataque diario", afirmó Maduro.
El ministro de Energía Eléctrica, Luis Motta, atribuyó el apagón al "desprendimiento de un puente" que provocó problemas en "un cable de unos seis o cinco metros" en "una subestación que está generando con las torres de transmisión".
"Afortunadamente nuestro pueblo reaccionó rápido, nuestras instituciones, y a las cuatro de la tarde ya habíamos restablecido todo el servicio", remachó el presidente, que presumió de la capacidad de respuesta de su Gobierno.
"Un ataque que en cualquier parte pueden pasar días enteros, hasta una semana para restituir el servicio", dijo Maduro, que aseguró que los "grupos de Miami" que estarían detrás del apagón "no quieren que el pueblo tenga una Navidad feliz".
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