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ONU y EE.UU. urgen detener “violencia letal” en Birmania

“Hago un llamado a respetar el resultado de las elecciones y regresar al gobierno civil”, dijo el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres.

DEUTSCHE WELLE

20 de febrero de 2021 11:25 PM

El secretario general de la ONU, António Guterres, condenó el sábado (20.02.2021) “el uso de fuerza letal” en Birmania, donde unas horas antes se registraron dos muertos por disparos de las fuerzas de seguridad contra manifestantes antigolpistas.

“Condeno el uso de violencia letal en Birmania”, escribió Guterres en Twitter. “El uso de fuerza letal, intimidación y asedio contra manifestantes pacíficos es inaceptable”, agregó.

“Todos tienen derecho a reunirse pacíficamente. Hago un llamado a todas las partes para que respeten los resultados de las elecciones y regresen al gobierno civil”, agregó el jefe de la ONU.

Dos manifestantes murieron y una treintena resultaron heridos el sábado en Mandalay, en el centro de Birmania, por disparos de la policía durante una manifestación contra la junta militar, la actuación más violenta de las fuerzas de seguridad desde el golpe de Estado del 1 de febrero.

Esta escalada de violencia se produjo el día después de que muriera Mya Thwate Khaing, empleada de una tienda de comestibles herida de bala el 9 de febrero y cuyo funeral se celebrará el domingo.

Por su parte, el portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Ned Price, dijo que el gobierno de Joe Biden está “profundamente preocupado” debido a que las fuerzas de seguridad birmanas dispararon contra manifestantes y continúan deteniendo y acosando a los disidentes.

Price había instado el viernes a los militares de Myanmar a abstenerse de la violencia y a abandonar el poder tras la primera muerte en las protestas contra el golpe.

Los militares de Myanmar derrocaron a la líder civil Aung San Suu Kyi, lo que dio lugar a protestas en favor de la restauración de la democracia, pese a los esfuerzos de la junta por obstaculizar las comunicaciones.

Una concentración celebrada el 9 de febrero en la capital, Naypyidaw, se tornó violenta y la policía disparó balas de goma. El viernes se confirmó la muerte de Mya Thwate Thwate Khaing, que cumplió 20 años mientras estaba inconsciente en una cama de hospital, por un disparo en la cabeza.

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