Perú: Caso de vicepresidente daña imagen anticorrupción

El primer ministro peruano Salomón Lerner admitió este sábado que la participación del vicepresidente Omar Chehade en un caso de presunto tráfico de influencias es lamentable y mella la imagen anticorrupción del gobierno de Ollanta Humala. 
“El caso de Omar es lamentable, específicamente para un gobierno donde una de las banderas ha sido la lucha contra la corrupción, y que esto pueda ser de alguna forma interpretado como que no se va a seguir en esa ruta”, declaró Lerner a la radio RPP. 
Lerner señaló que “el caso es una piedra en el camino, indeseable, y Omar Chehade tendrá que responder a todas las preguntas que le hagan en las comisiones de investigación” en el Congreso y la fiscalía. 
“Nuestro posicionamiento del tema es que hay que esperar la verdad”, antes de tomar una decisión final sobre la suerte política del vicepresidente, quién ha sido abogado del presidente Ollanta Humala en un caso de derechos humanos. 
Lerner aseguró, sin embargo, que el gobierno quiere que cualquier persona que haya cometido una falta se rectifique o que sea separado del cargo público que detenta. 
La oposición exige la renuncia inmediata del vicepresidente, quién es además parlamentario del oficialista Partido Nacionalista. Chehade ha aceptado ser investigado y alega inocencia. 
Chehade fue acusado a mediados de octubre por el general de la policía Guillermo Arteta quien dijo que el legislador le expresó su interés en que se desaloje a los trabajadores que ocupan desde hace tres años una cooperativa azucarera para ser entregada al importante grupo de alimentos Wong. 
El vicepresidente niega la acusación y señala que todo es producto de una venganza del general porque fue pasado a retiro junto a otros 29 generales de la policía como parte de una “reingeniería” dispuesta por el gobierno para mejorar su eficiencia y eliminar la corrupción en esa institución.