Una de las personas heridas en los graves enfrentamientos que se produjeron el pasado jueves en la región sureña de Ayacucho falleció este sábado, con lo que se elevaron a 9 las víctimas mortales en ese departamento, y a 23 el total de decesos en todo Perú desde el inicio, hace una semana, de las protestas y manifestaciones contra el Gobierno de Dina Boluarte. Lea: Perú: suben a nueve los fallecidos en primer día del estado de emergencia
“Se informa que, pese a todos los esfuerzos del personal de salud y médicos del Hospital Regional de Ayacucho, uno de los heridos falleció en horas de la madrugada de hoy”, informó la Dirección Regional de Salud (Direa) de Ayacucho en un comunicado.
El organismo agregó que en su jurisdicción también se reportan 61 heridos tras los violentos enfrentamientos que se dieron entre manifestantes que intentaron tomar el aeropuerto de Ayacucho y miembros de las fuerzas de seguridad que lo resguardaban.
Ayacucho ha sido, junto con la región vecina de Apurímac, el epicentro de las protestas desatadas luego del fallido intento de golpe de Estado de Pedro Castillo y su posterior destitución por el Congreso, el pasado 7 de diciembre, tras lo cual juró como gobernante la hasta entonces vicepresidenta Boluarte.
El viernes, al menos tres manifestantes fallecieron en enfrentamientos con la Policía en el distrito de Pichanaki, en la región central de Junín. Lea: Aeropuerto de Cusco suspende operaciones por “turba de manifestantes”
Los fallecidos en Ayacucho y Junín se sumaron a otros seis reportados en Apurímac, tres en La Libertad, uno en Arequipa y otro en el Cuzco.
Legitimidad constitucional del Gobierno
Mientras que las muertes en Apurímac se produjeron el pasado fin de semana, las de Ayacucho se reportaron este jueves, en medio de las protestas que se intensificaron para reclamar el cierre del Congreso, la renuncia de Boluarte, adelanto de elecciones y la convocatoria de una asamblea constituyente.
El Gobierno decretó este miércoles el estado de emergencia nacional por 30 días para controlar los actos de vandalismo y violencia presentados en las manifestaciones y el jueves decretó toque de queda en 15 provincias de ocho departamentos.
La presidenta peruana ratificó este sábado la legitimidad constitucional de su Gobierno, mientras que las fuerzas de seguridad aseguraron que paulatinamente retoman el control en el interior del país.
“Quiero hacer llegar mis condolencias a las familias que han perdido a sus familiares en estos tiempos donde se ha generado una violencia innecesaria para el Perú entero”, señaló.
Boluarte también exigió al Congreso que apruebe la propuesta del Ejecutivo para adelantar las elecciones generales y enfatizó que no va a renunciar al cargo.
“Esas no son marchas pacíficas, no son reivindicaciones sociales”, acotó antes de añadir que las Fuerzas Armadas “han salido” a las calles “para poder cuidar” a los ciudadanos y los bienes públicos y privados.
Este sábado no se reportaron incidentes mayores en el país, aunque en Ayacucho hubo manifestaciones pacíficas como parte de los funerales de las personas que murieron en esa región peruana.
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