El ruido de un tiroteo sembró el pánico en un evento encabezado por el presidente municipal de Nuevo Laredo, en el estado de Tamaulipas (noreste del país), aunque no se reportaron personas heridas.
En un vídeo subido en redes sociales, se ve al alcalde Enrique Rivas, acompañado de otros funcionarios, en la entrega de un mural en la colonia Las Torres.
Cuando Rivas le está entregando a un niño unos regalos, empiezan a sonar los tiros, que provocan sorpresa y estupor a los presentes. A continuación, el público comienza a dispersarse y se echa al suelo, mientras continúan los disparos.
La Secretaría de Seguridad de Tamaulipas informó, a través de la cuenta de Twitter de la vocería, que se produjeron "detonaciones en la colonia aledaña" al evento, pero que el ataque no iba dirigido al acto.
"Por seguridad, las personas fueron instruidas de tirarse al piso", y no se registraron lesionados, agregó.
El presidente municipal publicó horas más tarde un vídeo para explicar el "lamentable hecho".
Elementos de la Marina interceptaron un vehículo que se dio a la fuga, lo que generó "tensión, caos, pánico y confusión", relató.
No obstante, el alcalde remarcó que Nuevo Laredo, fronteriza con Estados Unidos, es "mucho más que este tipo de situaciones".
"Seguimos adelante, nada nos va a distraer (de) llevar a cabo nuestra función, nuestro trabajo", afirmó Rivas, quien defendió que la ciudad está "de pie".
Tamaulipas, en el noreste de México, ha sido por años escenario de violentos choques entre grupos del crimen organizado, principalmente el cártel del Golfo y los Zetas, y entre los delincuentes y las fuerzas de seguridad.
En ciudades fronterizas como Nuevo Laredo, Matamoros y especialmente Reynosa se producen periódicamente este tipo de confrontaciones.
En Reynosa, un elemento de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) falleció el martes tras un enfrentamiento con un grupo armado, mientras otros cinco resultaron heridos y tuvieron que ser trasladados para recibir atención médica.
Esta mañana, fuerzas de seguridad activaron un protocolo para despejar vialidades de esa misma ciudad que fueron bloqueadas con vehículos por grupos delictivos.
Asimismo, se desplegó "patrullaje terrestre y aéreo" en varios puntos de la ciudad, después de que los ciudadanos reportaran una confrontación entre grupos civiles armados.
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