El régimen cubano anuncia que a partir de la fecha los cubanos que así lo deseen si pueden abandonar la isla. Claro que cumpliendo algunos requisitos entre los que están el interés público, la seguridad nacional, amen de varias decenas de dólares que no le sobran a la decaída economía de la isla.
Muchos dirán que esta condición no es muy cara porque al principio de la revolución a muchos les costó el duro exilio y a los balseros la vida en la lucha desigual con el océano que los separaba de la Florida.
Cuando cubanos y hombres libres del mundo apoyaron a los rebeldes que desde Sierra Maestra prometían la guerra para llegar a la libertad no sospecharon que esos mismos promeseros les robarían esa libertad por mas de cincuenta años.
Los indignados de Europa y los que gritan ofendidos en Wall Street, secuela ignominiosa del capitalismo voraz no justifican ningún sistema que arropado con slogan anti imperialista, se erija como guía y dueño de la libertad de los individuos.
Cuba momentáneamente deja de ser una prisión y uno se pregunta evocando al pájaro que paga largo cautiverio en una jaula cuanto tiempo ha de pasar para que dos generaciones de cubanos aprendan a volar con las alas de la libertad
Gabriel Cuadro de la Hoz
C.C 3782850 de Cartagena.
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