Nuestro sector del derecho, como nunca antes en la historia de la juridicidad en el departamento de Bolívar, se ha encontrado tan deslegitimado, factor principal de la utilización de las vías de hecho. A nuestra ciudad llegó el poder oscuro de las bandas criminales y el sicariato siendo uno de los sectores más afectados el de los abogados, donde en días pasados terminó con la vida del colega Raúl Castilla, ante la mirada impotente de su propio hijo. Las cifras de abogados asesinados en el departamento de Bolívar, entre el año 2010 hasta la fecha son aterradoras. Cuando existen denuncias de presuntas organizaciones entre un magistrado Disciplinario del Concejo seccional, por el tráfico de influencias y prevaricato; cuando algunos funcionarios y abogados le quiebran la real interpretación y el espíritu de la ley, empecinándose en llamar blanco a lo que no es amañando teorías jurídicas; cuando no se asciende al funcionario judicial por sus capacidades, trayectoria y méritos, sino por otras circunstancias, seguirán visitando a nuestros colegas los anormales sociales de las motos y las pistolas. La tarea es volver a legitimarnos, recuperar el valor justicia por encima de cualquier requerimiento material que lo sacrifique. Entendemos que este propósito será posible si recuperamos la dignidad del sector judicial, edificando su fe en la libertad y los derechos fundamentales del hombre.
Raúl Bustamante de la Vega.
C.C. No. 73.142.594 de Cartagena.
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