Columna


El palacio y la academia

“Es importante destacar que en el Palacio de la Proclamación estará la sede de la Academia de la Historia de Cartagena. Decisión impulsada por el gobernador”.

DARÍO MORÓN DÍAZ

12 de octubre de 2019 12:00 AM

El Palacio de la Proclamación emergió nuevamente en su lugar histórico exhibiendo una belleza que calificamos como mayestática.

Esa estructura remodelada reemplazó aquella vetusta y desvencijada mole que, por acción de la adición de un exceso de entresuelos, construidos sin la debida planeación convirtieron la edificación en un verdadero monumento del desorden y la algarabía.

El Palacio ahora exuberante en detalles arquitectónicos de buen gusto, elaborados con maestría por el grupo encargado de esa restauración recupera para la Cartagena colonial el principal papel de establecimiento emblemático. Sin duda el Palacio de la Proclamación se puede equiparar con los monumentos de su índole en París, Roma o Atenas.

El nuevo palacio es el resultado de la decisión del gobernador Dumek Turbay Paz que con verdadera vocación innovadora y su reconocida diligencia administrativa se propuso coronar esa obra. La inversión financiera fue de 39 mil millones de pesos; cifra que evidentemente está representada con creces en la estructura material del propio Palacio que cuenta con todas las comodidades en materia de locales amplios con servicio de ascensores, aire acondicionado central y una iluminación moderna y admirable.

En el Palacio se distribuyó el ejercicio por sectores, no solamente en el aspecto administrativo de la Gobernación, sino en lo cultural, las artes y la gastronomía.

La Academia de la Historia. Es importante destacar que en el Palacio de la Proclamación estará la sede de la Academia de la Historia de Cartagena. Decisión impulsada con entusiasmo por el gobernador Dumek Turbay para una Academia que nació en el Salón Amarillo el 17 de diciembre de 1911, presidida por Camilo S. Delgado, Miguel Gómez Fernández, Manuel Pájaro H., Manuel Posada García, Manuel Dávila Flórez, Manuel Posada, Lácides Segovia, Eduardo Gutiérrez de Piñeres, Gabriel Porras Troconis, Fidel Pérez Calvo y Luis Patrón Rosano.

Ahora por decisión del mandatario departamental retorna a su lugar de origen, a recuperar la categoría de actor principal en la Historia de Cartagena; una condición intelectual que le fue arrebatada hace algún tiempo, por arte de birlibirloque. Como resultado de ello ha estado arrinconada en un sombrío lugar del Palacio de la Inquisición.

Con el advenimiento del remodelado Palacio de la Proclamación una obra colosal, las próximas festividades de la independencia del 11 de noviembre, tendrán un motivo valioso, cultural e histórico para ufanarse por contar con un actor material de gran significación, ajena a lo adjetivo e intrascendente.

*Exdirector de El Universal. Académico de Medicina e Historia.

Comentarios ()

 
  NOTICIAS RECOMENDADAS