Les contaba en la columna anterior que en startupclass.samaltman.com tienes acceso a un prestigioso curso de la universidad de Stanford que te permite conocer en detalle los aspectos más importantes para emprender, pero contado por personajes ilustres del emprendimiento. Una verdadera joya.
Continúo entonces con algunos apuntes y aprendizajes que me han parecido relevantes de los videos que he visto:
1. Todo el mundo puede tener una buena idea, pero son pocos los que están dispuestos a trabajar arduamente y a sacrificarse para ejecutarla y así crear una compañía exitosa. Debes identificar esas personas que no están del todo dispuestas y lo que quieren es “chupar rueda” de los que sí están prestos a “sudarla”. A esos no los quieres.
2. Una de las mejores maneras de generar inercia en un proyecto que está comenzando, es obteniendo Pequeñas Victorias Rápidas. Es decir, obteniendo desde el mismo comienzo cartas de intención de clientes que apoyen la idea, contratos iniciales (aunque sean pequeños) que le den espaldarazos a la idea, salir a celebrar pequeños logros, lanzar al mercado adiciones del producto, etc.
3. No te preocupes por la competencia que sale en los medios dando de qué hablar. La más peligrosa es la que está trabajando silenciosamente haciendo productos increíbles que pueden llegar a romper el mercado.
4. Si estás ingresando a una nueva industria con un emprendimiento o proyecto, conviértete en experto de la misma. Si por ejemplo, vas a entrar a la industria de la limpieza de oficinas, entonces ingresa como empleado a una empresa que hoy en día se dedica a eso; aprende cómo funciona la empresa; aprende cómo los departamentos de compras contratan a estas empresas metiéndote en los departamentos de compras, etc.
5. Al diseñar la experiencia de tu producto, haz un storyboard, o proceso gráfico que ilustre paso a paso la experiencia ideal que debe vivir tu cliente con tu servicio o producto; desde la preventa hasta la posventa.
6. Identifica segmentos de clientes y analiza cómo crecen las ventas en cada uno de ellos; esto te permitirá comprender cómo actuar para cada uno y así crecerás de manera más sostenida. No sólo lo hagas para monitorear el crecimiento en ventas de cada segmento, sino para el resto de indicadores; uno de los clave por ejemplo, es el costo de adquisición de cada cliente (cuánto te cuesta adquirir cada cliente) y otro es el valor total de vida de cada cliente (cuánta utilidad te deja cada cliente a lo largo de su vida en tu compañía). De esto hablaré en la siguiente columna.
*Director de Criterium - Investigador de mercados – asesor estratégico
gerardo@criterium.com.co;
Twitter: @CriteriumSAS
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