“La vida consiste no en tener buenas cartas, sino en jugar bien con las que uno tiene”, oí decir cuando pelaito, y desde entonces aplico esta frase en la vida, la que veo como un juego, algunas veces perverso, como una obra de teatro, cada quien representando un rol o personaje y diciendo un guion escrito por otros, y/o como un sueño, para muchas personas una pesadilla por el hecho de no haber nacido en cuna de oro, no tener pene, no tener la piel blanca, tener el cuero negro, atraerle alguien del mismo equipo o sexo, nacer en el cuerpo equivocado, haber sido parido en el tercer mundo o en el bajo mundo, o por ser pequeño.
En el barrio Loma Fresca, en las faldas de La Popa, hay un bonche de pelaos y algunos adultos, entre ellos uno al que le dicen “El Tigre”, que no tienen un campo donde hacer deportes y se las ingenian para jugar bola de trapo hecha con una de sus medias, así como algunos se rebuscan para llevar un bocado de comida a sus casas por no contar con un campo de trabajo formal. Lo hacen en una de las calles del barrio a la que se le conoce como Cementerio, por la gran cantidad de personas que por ahí han perdido la vida de manera violenta, si es que se le puede llamar calle a una pendiente o paso destapado sin pavimentar, lleno de montes y basuras, pero con una gran vista.
Si por ellos fuera, jugaran bola de media a cada momento en el Cementerio, o sóftbol en el estadio José Miguel Corpas de Santa Rita porque a varios les sobra tiempo, ya que no estudian ni trabajan, pero no pueden hacerlo porque varios vecinos y familiares no se lo permiten, pues han roto techos con los batazos y porque para bajar a Santa Rita tienen que hacerlo con cuidado para no encontrarse con viejos enemigos en el camino.
Juegan en la calle a pata pelá, batean con un bate de palo hecho por ellos mismos, o con un bate de aluminio fiado. Las manillas parecen bofes, no usan bombachos y las bases están hechas con desperdicios.
Juegan bien con lo que tienen, pero quieren tener mejores implementos, cartas y oportunidades para ser mejores jugadores, personas y ciudadanos, para jugar mejor en el campo deportivo y en otros terrenos, no quieren ser ponchados, estar out o fuera del juego de la vida, no desean morir violentamente en el Cementerio.
El lector que quiera estar libre de pecados, que tire la primera bola a este bonche de pelaos que hacen parte del equipo “Los Tigres de Loma Fresca”.
*Lingüista, Literato y Comunicador para el Desarrollo.
puntos_de_encuentro@hotmail.com
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