Por injusta e irrespetuosa rechazo la impugnación hecha en La W por el gerente de Compas contra el procurador ambiental, a quién acusa de confabulación con la Sociedad Portuaria en la citación de la Audiencia Pública Ambiental convocada por la ANLA, una etapa legal prevista para aprobar las licencias ambientales.
Alberto Jiménez, gerente de Compas, afirma que hay amistad entre el procurador delegado, Gilberto Blanco, y el exmagistrado Humberto Sierra, apoderado de la Sociedad Portuaria en el evento en que se opusieron a que ANLA apruebe la licencia ambiental. Este alegó, entre otras, una deficiente socialización del proyecto de expansión portuaria, para impedir que Compas aumente el manejo de la carga por esa rellenada esquina caliente de la bahía interior.
Mostraron un video de simulación con un barco girando en “su mare nostrum”, que al dirigirse al puerto de Compas, impacta al crucero de la última línea de atraque, un riesgo que no ha sucedido pero descalifica el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) elaborado por Aqua&Terra.
Hoy la Sociedad Portuaria recibe el 95% de la carga y Compas solo el 5. Si le aprueban la licencia aumentaría su capacidad de atraque y recepción, alcanzando un 25% de participación en el mercado. Interesan las ganancias, no el ambiente.
Lo competitivo y su mezquindad son expresión del conflicto internacional por el mercado, y sin límites sólidos y legislación no transable, rellenar o dragar el ecosistema marino como necesidad u obsesión de crecer, adaptar la naturaleza para atraques, significará más daños irreparables y aprovechamientos indebidos.
En la concentración de poder todo se vale, por eso la acusación al procurador desconoce que la audiencia fue promovida por la crítica ciudadana, el valor de los intereses superiores y las razones constitucionales que se sintetizan en que el interés general prima sobre el particular, y que con la riqueza natural y el cambio climático no se juega.
Nos oponemos a este y otros proyectos o acciones de rellenar el cuerpo de agua -incluso de la Sociedad Portuaria- y participamos en la audiencia por la consciencia de que la Procuraduría equilibra la defensa del ambiente ante los poderosos intereses de puertos y líneas marítimas que compran puertos -caso Compas- para integrar verticalmente lo portuario y lo logístico.
Lo que hace el procurador Blanco Zúñiga no es defender el monopolio de la Sociedad Portuaria, ¡no!, es injusta esa acusación contra quien con rigor ejerce su función y pide a la ANLA citar la primera audiencia pública ambiental, en defensa de los intereses de la sociedad y los intereses colectivos, en especial el ambiente.
Como resultado de la gestión de este pulcro funcionario, hoy el procurador general de la Nación expidió la ‘Directiva de Cambio Climático’, que obliga a todos los funcionarios a cumplir con esa política y estrategias, so pena de ser sancionados.
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